El caudal de los ríos se dispara después de las últimas lluvias en Ourense


El caudal de los ríos ourensanos creció tras las abundantes precipitaciones del fin de semana. En algunos de los cursos fluviales de la provincia, el nivel del agua llegó a rozar el acceso de activación de alerta, como sucedió en el Sil e incluso en el Miño.

El Arnoia estuvo bajo la lupa de los servicios de emergencias adentro del Plan Exclusivo en presencia de el Aventura de Inundaciones en Galicia (Inungal) a lo generoso de la caminata. En este sentido, se pedía extremar la precaución en los concellos de Allariz, Baños de Molgas, Vilar de Suburbio y Maceda en presencia de posibles desbordes. El aviso no quedó desactivado hasta la tarde, aunque otros siete ríos gallegos continuaban siendo objeto de seguimiento.

En Valdeorras

En O Barco de Valdeorras, las aguas del Sil inundaron de nuevo las riberas. La playa del Malecón quedó sumergida al punto que unos días posteriormente de que culminara la rehabilitación de su senda fluvial, arrasada por el postrer desbordamiento. Adicionalmente, el caudal se disparó: si el domingo por la orto al punto que había 100 metros cúbicos por segundo, ayer a primera hora de la mañana se  contabilizaban 585, muy cerca del acceso de activación.

Incluso se catapultó el caudal del Miño a su paso por la ciudad. De los 263 m3/s del domingo a la una de la tarde, se pasó  a los 768 que se registraban al falleba de esta tiraje. Poco similar sucedió con el resto de ríos, según la información que actualiza permanentemente la Confederación Hidrográfica.

Embalse de Velle
Embalse de Velle

El aumento del caudal se corresponde con las copiosas precipitaciones que dejó tras de sí la última peligro. Por ejemplo, la etapa de Amiudal (Avión), una de las que reciben más tromba de la provincia, recogió 164 litros por medida cuadrado desde el pasado jueves.

Un respiro pasajero antaño de despedir febrero con lluvias y bajas temperaturas

Todo apunta a que los cielos darán un respiro hoy y mañana. Según la predicción de Meteogalicia, la influencia de las altas presiones limpiará los cielos de tromba, aunque la situación seguirá inestable. Las temperaturas continuarán siendo bajas, con una mínima de 3º mañana en la ciudad y una máxima de 15º.

La tregua durará poco: el jueves, la provincia quedará a la sombra de un frente frío que traerá consigo lluvias y un fútil descenso de temperaturas. Esta situación se prolongará durante el fin de semana, de acuerdo con las previsiones de la agencia meteorológica gallega. Asimismo, se dilación que las precipitaciones caigan en forma de cocaína en las zonas de la montaña ourensana.

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