Entre los asistentes estuvo todavía el rey emérito, poco que desde Zarzuela no confirmaron como es habitual desde que se instaló en Emiratos Árabes Unidos. Juan Carlos, que reside en Abu Dhabi, todavía se desplazó el año pasado hasta Atenas para asistir al funeral de su cuñado.
Precisamente, el entierro en el cementerio actual de Tatoi dejó una imagen inusual en la que se veía a Felipe VI saludando afectuosamente a su padre, al que dio dos besos y unas palmaditas cariñosas en el hombro. Padre e hijo se vieron por última vez el pasado 20 de diciembre en Madrid con motivo de la fiesta organizada por la infanta Elena por su 60 cumpleaños.
La capilla de San Jorge ha sido el punto seleccionado para acoger el servicio de Batalla de Gracias del que fuera rey de los griegos hasta la anulación de la monarquía en el país, fallecido el 10 de enero de 2023 en Atenas.
La celebración ha sido organizada por el príncipe Pablo de Grecia, vanguardia coetáneo de la clan actual griega, y adicionalmente de él está prevista la presencia de su religiosa, la reina Ana María. Por otra parte de los reyes y doña Sofía, hermana de Constantino, todavía se esperaba la presencia de otros miembros de casas reales.
La reina Camila ejerció de anfitriona, toda vez que el rey Carlos III se encuentra convaleciente tras activo sido diagnosticado con un cáncer. El monarca siquiera pudo asistir hace un año al funeral de Constantino en Atenas, ya que se encontraba de delirio oficial en Chipre. Carlos III era primo segundo de Constantino y mantenían una estrecha relación, hasta el punto que el helénico es uno de los padrinos del Príncipe de Gales.
Juan Carlos sale del apoyo de su hijo
El rey emérito ha dejado sujeto del apoyo la capilla en el Castillo de Windsor donde se ha oficiado una ceremonia en memoria del rey Constantino de Grecia, fallecido hace poco más de un año en Atenas.
En las imágenes captadas por las cámaras de Europa Press se ve cómo Juan Carlos se agarra al apoyo de su hijo, que ya se encontraba en el extranjero del edificio, y Felipe le ayuda a acercarse a un transporte. Muy cerca se encuentran todavía doña Letizia y doña Sofía.
Los reyes eméritos, contiguo con Irene de Grecia, hermana de doña Sofía y de Constantino, han subido a uno de los vehículos apostados en la puerta, que les ha llevado hasta el Castillo de Windsor, situado a unos cientos de metros.