La empresa matriz de Red Bull Racing, Red Bull GmbH, anunció el pasado 5 de febrero que Horner estaba siendo investigado tras una inculpación de “comportamiento inapropiado” por parte de una compañera, poco que el britano negó rotundamente.
“La investigación independiente sobre las acusaciones formuladas contra el Sr. Horner se ha completado, y Red Bull puede confirmar que la queja ha sido desestimada. El denunciante tiene derecho a apelar”, ha informado ahora Red Bull GmbH. Esta dice que “confía en que la investigación ha sido competición, rigurosa e imparcial“.
“El mensaje de la investigación es confidencial y contiene información privada de las partes y de terceros que colaboraron en la investigación, por lo que no haremos más comentarios por respeto a todos los implicados. Red Bull seguirá esforzándose por cumplir las normas más estrictas en el oportunidad de trabajo”, apostilló sobre el director britano de 50 abriles.
El medio germánico ‘Bild’ detalló en su momento que el director de Red Bull habría enviado unas fotos inadecuadas a una empleada de la escudería austríaca.
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