¿Por qué escritor y no abogado?
¡Porque es mucho más divertido ser escritor! No hay ni punto de comparación, es muchísimo mejor. Estamos hablando de una profesión que me deja ser librado, contar mis historias, no hay ausencia que pueda equipararse a eso, es demasiado atún.
Son ya muchos libros.
La verdad es que no llevo la cuenta. Creo que unos ocho y un audiolibro. Pero bueno, se puede afirmar que ya empiezo a tener callo. Y que soy uno de los afortunados que no se puede quejar, porque soy un escritor que vive de lo que escribe, que somos muy poquitos en España. Si juntamos la editoriales no debemos aparecer a cien personas que vivan única y exclusivamente de la escritura, así que soy un privilegiado.
¿Cuándo se dio cuenta de que quería dedicarse a escribir?
No hubo una epifanía. Es lo que he hecho siempre, desde que tengo uso de razón. Cuando era pequeño en el cole yo era el que contaba las historias. Luego en la carrera estudié Derecho, que incluso es una persona que cuenta cosas, solo que a un árbitro en vez de a un montón de multitud. Hasta en mis incursiones por lo audiovisual me sale de una modo tan natural que me he acostumbrado a comportarse con esa sensación.
¿En qué se inspira para escribir?
Pues depende del tomo, de la historia… Dicen que lo escritores somos como vampiros emocionales, que somos como las ardillas que van acumulando cosas en el invierno y nosotros acumulamos experiencias de lo que vemos, leemos, lo que nos cuentan… Todo eso lo guardamos, y cuando escribimos no nos damos cuenta de que es poco que hemos vivido o que determinado nos ha contado y que se puede cambiar en un hábitat de la historia.
¿Qué es lo más difícil del proceso creativo?
Lo más difícil es entender dónde vas y el contexto. Tiene que suceder un portería de transformación de los personajes, una transformación… tienes que tener claro cuáles son las recompensas para el leedor. Hacer que todo encaje para que el tomo consiga eso tan difícil que es la barrera de la suspensión de la credulidad. El leedor sabe que lo que está leyendo es mentira, ¡determinado se lo ha inventado! Cuando ves una película sabes que son actores, que es mentira. Pero hay un pacto tácito, no escrito, entre leedor y autor que es la suspensión de la credulidad, que cuando se da, hace que no puedas detener de sobrevenir las páginas.
¿Esa es una de las cuestiones que tratará en el Foro?
Sí, eso y todas las cosas terribles y divertidas que te pueden sobrevenir mientras escribes. Desde cómo abrir a organizarla, cuáles son los personajes principales, cuáles son los personajes secundarios… Animo a la multitud a que venga al Foro porque no solo van a educarse de dónde salen las historias, sino que van a salir con un montón de cosas en la vanguardia y se lo van a sobrevenir muy proporcionadamente. Prometo que va a ser una de esas charlas divertidas en las que nadie mira el cronómetro y que les va a paladear mogollón.