“Más pronto que tarde”, pero el PNV está convencido de que habrá Gobierno de coalición presidido por Pedro Sánchez. Así lo afirmó este jueves Koldo Mediavilla, responsable de política institucional del partido, en una entrevista radial. El líder peneuvista ha reiterado que cualquier opción de apoyar una investidura liderada por Alberto Núñez Feijóo está completamente descartada.
Como vienen haciendo todos los representantes nacionalistas desde el 23J, ha argumentado su negativa en que Vox sigue formando parte de la ecuación política. Mediavilla recordó que la candidatura de Alberto Núñez Feijóo “representa a 137 parlamentarios”, lo que de facto implica que la 33 diputados del partido de Abascal Están incorporados a él. “Vox ex inherente a la candidatura de Núñez Feijóo”, ha sentenciado. También ha vaticinado que el PNV no sólo no participará en esta alternativa, sino que “la afrontará abiertamente”.
De hecho, el líder peneuvista se ha preguntado “qué sentido tiene” que el líder del PP se presente a una investidura en la que ni siquiera considera “ni de lejos” un posible apoyo de Junto o del resto de formaciones políticas. Por eso se ha mostrado convencido de que es cuestión de tiempo que Pedro Sánchez sea presidente, “más pronto que tarde”.
Mediavilla ha apelado a la carrera del presidente en funciones y todas las veces ha conseguido superar situaciones que parecían no tener retorno. “Es un gran corredor de carreras de obstáculos”., afirmó, lo que, a su juicio, le llevará a hacer “lo imposible para seguir en Moncloa”. «Una vez nominado será muy difícil de desalojar“, ha añadido.
Compromisos y transferencias
Aunque para el Gobierno de coalición que Mediavilla ve como la única opción plausible de reeditar, Sánchez tendrá que superar numerosas dificultades. Entre ellos, negociación con un PNV que tiene cierto resentimiento tras los incumplimientos de la pasada legislatura. “Para que eso suceda, tiene que haber compromisos firmes y voluntad de cumplirlos más adelante”, insistió.
El principal objetivo de los peneuvistas es retomar el calendario de fichajes que, tras firmarse, se ha convertido en pandemia por el agua de borraja. Ese calendario contemplaba decenas de traspasos y culminó con el más simbólico para los nacionalistas vascos. “Por supuesto, el régimen económico de la Seguridad Social”, afirmó Mediavilla, competencias que aparecen en el Estatuto de Guernica. “Es una de las materias básicas en las que se debe cumplir lo que es la ley”, insistió.
Pese a ello, el PNV no es ajeno a la situación de gran complejidad que supondrá todo acuerdo. A todo ello habría que sumar la experiencia “no demasiado positiva” de la pasada legislatura. Sin embargo, cualquier acuerdo siempre será mejor que una repetición electoral en uno de los momentos más débiles del partido. “Es lo peor que podría pasar”el insistió.
Esta hipotética repetición se celebraría también en una más que probable precampaña regional en el País Vasco, con EH Bildu muy fuerte en los sondeos. Por lo tanto, la guiños a los postulados más nacionalistas desde el inicio del curso político. Es en este marco en el que debe enmarcarse la propuesta de Iñigo Urkullu de crear una convención constitucional.
Mediavilla ha insistido en que abordar la cuestión territorial será inevitable en esta legislatura. “Hay un problema de conexión territorial y de sensibilidades nacionales en el conjunto del Estado español, y hay que solucionarlo”, insistió. Ante ello, ha criticado los últimos “pronunciamientos” del Partido Popular al respecto. “Un día hace una declaración y al día siguiente se ve obligado a matizarla”, criticó.