La inauguración del nuevo albergue de Piñor sufre un retraso de más de dos meses, irresoluto exclusivamente de que se ejecute la conexión eléctrica, según declaraba el corregidor, José Luis González, quien señalaba que las instalaciones están acabadas y totalmente equipadas, listas para entablar a funcionar.
El regidor municipal todavía anunciaba una próxima intervención de la Xunta de Galicia de acondicionamiento del entorno, si correctamente matizaba que esta obra no influirá en categórico en la comprensión del albergue, solamente irresoluto de que la empresa eléctrica realice las conexiones necesarias.
El extremo esquema a ejecutar en este entorno de la aldea del Arenteiro zapatilla el comunicación y terrenos en los que están ubicadas las antiguas construcciones rehabilitadas, mediante la colocación de torpe de roca, creación de espacios ajardinados e iluminación de las edificaciones, con una inversión total de 133.000 euros.
El Concello de Piñor está a la aplazamiento de admitir el noticia correspondiente de Patrimonio para conceder la deshonestidad de obras y así embellecer todo el entorno de este singular albergue.
La Vía da Prata incorporará así un nuevo albergue para los peregrinos con 36 nuevas plazas, ofreciendo todavía una importante novedad, ya que será el primero en disponer de caballerizas para dar servicio a quienes realizan el camino a Santiago a heroína.
La inversión en este esquema ronda 1,1 millones de euros. Para ello, el Concello de Piñor adquirió una casa semirruinosa y un antiguo almacén. La recibo, aseos, cocina y salón se ubicaron en la antigua vivienda, que comunica mediante un paso acristalado con otras nuevas construcciones en donde se habilitaron los dormitorios. Mientras que las caballerizas ocupan el edificio que antiguamente era almacén.
Las 36 plazas vendrán a sumarse a las 103 ya disponibles en esta etapa final de la Vía da Prata en la provincia, entre el albergue de San Cristovo de Cea; el antiguo alojamiento de peregrinos que dirigen los monjes de Oseira, en el que se acoge ahora exclusivamente a grupos, especialmente religiosos; y el nuevo albergue del Monasterio Santa María la Auténtico de Oseira