La tramitación y aprobación de esta norma es una de las condiciones que ha puesto el partido del expresidente catalán, Carles Puigdemont, para poder sacar delante una asamblea y la investidura de Pedro Sánchez como presidente del Gobierno.
Muchas son las preguntas en torno a cuáles son las diferencias entre un indulto y una perdón que, aunque ambas puedan sonar parecidas en el mismo ámbito, jurídicamente no son lo mismo.
¿Qué es la perdón?
Según el diccionario de la Existente Agrupación, perdón es el “perdón de cierto tipo de delitos, que extingue la responsabilidad de sus autores”.
Tanto en la Constitución como en el Código Penal no aparece la perdón, aunque en 1977 se aprobó una ley durante el contexto de transición de la dictadura a la democracia.
Asimismo, esta se convirtió en la primera norma que se aprobaba en el Congreso que se había predilecto democráticamente, cuyo objetivo final era reparar a las víctimas del franquismo.
La ley de 1977 puso en emancipación a los presos políticos de la época y anuló la tipificación como delitos o faltas de los actos con intencionalidad política sucedidos ayer de 1976.
¿Qué diferencia la perdón de un indulto?
La principal diferencia entre perdón e indultos surge en cuanto a que estos últimos son competencias del Gobierno, en tanto que la perdón concierne al Parlamento.
Por otra parte, la perdón conlleva el gratitud de que los delitos no han existido, mientras que los indultos son una “habilidad que excepcionalmente concede el patrón del Estado, por la cual perdona total o parcialmente una pena o la conmuta por otra más benigna”.
Es sostener, que un indulto solo perdona la pena y la perdón actúa como si los delitos cometidos no se hubieran producido.
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