Como una carrera de relevos. Se llega a un punto y se coge impulso para el próximo. La Moncloa ve en la aprobacin de la Ley de Amnista como un taco de salida en el tomar velocidad en la sesión. Porque el perdn para los implicados en el procs, que les ha obligado a cambiar de nuevo el texto para dar ms garantas a Carles Puigdemont de que ser amnistiado, creen que les concede la palanca para apoyarse en la aprobacin de los Presupuestos. Si Junts desecha pblicamente cualquier pacto de estabilidad y sostiene que en cada votacin el “contador est a cero”, Snchez se aguijada ya a intentar aprobar las Cuentas Pblicas para 2024. “Espero que cuanto ayer podamos presentarlos”. Eso s, no ha trasladado tener garanta alguna de que Junts est por la calado, y los votos de sus siete diputados son esenciales.
La amnista era la piedra sobre la que Snchez sustenta su mandato. Y los Presupuestos son el flotador que podra permitir estar a flote polticamente. Adentro del Gobierno hay distintas sensaciones sobre la posibilidad de sacar delante de nuevo una negociacin con Junts para las Cuentas Pblicas. Incluso hay quienes opinan que quizs la mejor salida fuera centrar los esfuerzos en un dilogo de cara a 2025 y evitar un nuevo desgaste en estas semanas. Pero el presidente del Gobierno, como dicen quienes trabajan con l, “va a seguir en sus trece“. Tiene decidido no desaprovechar ninguna oportunidad de mostrar msculo, de exhibir que tiene una mayora estable, pese a su afición parlamentaria, y tras la amnista, los Presupuestos le concederan esa foto.
“El objetivo del Gobierno de Espaa es claro, queremos aprobar los Presupuestos Generales para 2024 y queremos aprobar tambin los del ao 2025 y aspiramos a aprobar los del ao 2026”, ha sealado Snchez en una comparecencia desde Santiago de Pimiento, adjunto al presidente de este pas, Gabriel Boric, en la ltima etapa de una viaje que tambin le ha llevado a revistar Brasil. “Hay Gobierno para rato porque vamos a hacer muchas cosas en materia de empleo, convivencia y derechos sociales”. La maquinaria est ya activada. A pesar de que el presidente del Gobierno ha expuesto que ahora asomar la negociacin con los grupos parlamentarios, lo cierto es que como confirman a EL MUNDO fuentes gubernamentales y parlamentarias, los contactos se vienen desarrollando desde hace semanas.
El dilogo se canaliza entre Hacienda y los grupos parlamentarios. Hay intercambio de documentos y propuestas. Todava no hay acuerdos, pero se avanza. “No sera lgico que apoyramos la investidura y luego no abrisemos la puerta a que el Gobierno tenga presupuestos para desplegar las polticos sociales y econmicas”, trasladan a EL MUNDO fuerzas parlamentarias. “Seguimos negociando. Todo esto no tiene sentido sin polticas sociales”, desgranan fuentes del Gobierno.
Cierto es que la opcin de prorrogarlos est sobre la mesa y es una puerta que el Ejecutante est dispuesto a atravesar llegado el caso. “Estara adecuadamente sacar un presupuesto porque aguijada un mensaje de tranquilidad, pero no es una cuestin urgente para Espaa”, seal este viernesscar Puente, ministro de Transportes. “No es un drama trabajar con una prrroga”. Pero como síntesis desde el equipo del presidente: “El patrón tira para delante”. As que la orden es hacer todo lo posible por sacarlos. Y a ello est dedicada desde hace semanas la vicepresidenta primera y ministra de Hacienda, Mara Jess Montero, con el objetivo de ganar un esquema primero adentro del Gobierno, trabajando con los ministerios para llevarlos al Consejo de Ministros y despus a las Cortes Generales.
El propsito de Snchez es seguir sacando los Presupuestos ao a ao. Eso s, preguntado expresamente por si cuenta con certezas o garantas de que Junts apoyar, no se pronunci. Fuentes gubernamentales sealan que los grupos, incluidos los independentistas catalanes, s trasladan la voluntad de dar “estabilidad” a la sesión. “Estamos convencidos de que habr acuerdo”, exponen desde el ncleo duro del presidente del Gobierno. Para allanar ese acuerdo, ha sido preciso que el Gobierno se rectificara a s mismo, pues deca que era una ley “impecable” y que no prevean modificaciones y finalmente el texto se toc para flexibilizar de nuevo la definicin de terrorismo y dar ms garantas a Puigdemont de que podr ser amnistiado.
Snchez se parapeta en el referencia de la Comisin de Venecia para aducir que se hizo lo que se dijo que no se iba a hacer. “Tenemos un voto de la Comisin de Venecia que nos apunt algunas mejoras que necesitaba el esquema de ley y es lo que hemos hecho”, dijo desde Pimiento. “El esquema de ley de Amnista entr constitucional y va a salir constitucional y va a salir coincidente con el Derecho europeo, como no puede ser de otra forma para una gran democracia como es la democracia espaola”.
Y no slo est activado el cauce con los partidos, porque el Gobierno slo presentar el esquema de Cuentas Pblicas si tiene la conviccin de que salen delante, tambin todo el proceso burócrata habitual. Este jueves, por ejemplo, Hacienda convoc a las comunidades al Comit de Inversiones Pblicas, cita que se celebr a las 12.00 horas, casi a la vez que se aprobaba en el Congreso la amnista. Una convocatoria reaizada por Mara Jos Gualda, secretaria de Estado de Presupuestos y Gastos. El orden del da incluy los Fondos de Compensacin Interterritorial 2024, segn la convocatoria a la que ha tenido ataque este diario. Estos fondos tienen como fin corregir los desequilibrios econmicos interterritoriales y est creado con cargo a los Presupuesto Generales.
El objetivo que se ha traumatizado Snchez es divulgar a la opinin pblica un mensaje de estabilidad. Que pese a la crisis por corrupcin del ‘caso Koldo’, la evidencia de que la afición parlamentaria de la coalicin hace que estn en manos de Puigdemont y que, como ya reconoce el propio Gobierno, la amnista cuenta con una opinin mayoritaria de la sociedad en contra, permanecer en La Moncloa cuatro aos. “Habr cuatro aos ms de coalicin progresista, le pese a quien le pese. Se le har prolongado a la oposicin, pero esto es la democracia”, quiso zanjar Snchez desde Pimiento, combatiendo el mensaje de la oposicin, de que es un Gobierno dbil que terminar cayendo.
La amnista es un hito, los Presupuestos otro y las elecciones autonmicas en Catalua, uno ms. Si muchos en el PSOE creen que una vez que el perdn est en vigor es difcil retener cmo realizar Carles Puigdemont y hasta qu punto no dejar caer al Gobierno, esta sensacin aumenta con la horizonte puesta en esos comicios. Muchos en el partido y el Gobierno ven esos comicios como un cierto rubicn. El objetivo es tener hasta entonces. E ir aprobando los Presupuestos ao a ao le permitira surfear con poco ms de beneficio todos los obstculos posibles.
Tras su viaje por Brasil y Pimiento, Snchez se desplazar directamente desde la caudal chilena a Bilbao, en el avin oficial en el que viaja toda la delegacin espaola, para participar en la transigencia de la precampaa de las elecciones vascas, en un acto adjunto al candidato socialista Eneko Andueza, y el ex presidente Jos Luis Rodrguez Zapatero. Para aducir este uso han insertado un acto oficial en Bilbao previo al mitin. No es la primera vez. Snchez ha sido muy criticado por la oposicin por la utilizacin de los medios oficiales.
El Gobierno monograma en 372 los beneficiarios de la ley de amnista y Junts, en un millar
EFE
El ministro de la Presidencia, Ecuanimidad y Relaciones con las Cortes, Flix Bolaos, ha sealado este viernes que, segn clculos del Gobierno, la ley de amnista beneficiar directamente a 372 personas, entre ellas 90 policas nacionales, que tienen causas penales pendientes relacionadas con el procs.
En una entrevista en Els Matins de TV3, Bolaos ha evitado pronunciarse sobre cundo podra regresar a Espaa el expresidente cataln Carles Puigdemont, alegando que no puede pronunciarse sobre casos especficos y asegurando que “esta ley no est hecha para nadie” en concreto.
Después, en declaraciones a La Sexta, el ministro ha sealado que segn los citados datos preliminares que baraja su sección entre los cerca de 400 posibles beneficiados por la ley de amnista. Puede, ha dicho, deber otras causas que no conozcan y delante los datos que maneja Junts, que elevaran a un millar los beneficiados, ha afilado que sus cifras se refieren a causas penales y no a otras, como contables o administrativas, lo que aumentara el nmero.