El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, y el alcalde de Toledo, Carlos Velázquez, mantuvieron este viernes su primera reunión formal en el Palacio de Fuensalida, precisamente en una semana complicada por el paso de la DANA. Una cita de casi dos horas, en un ambiente cordial, de entendimiento y de la que ha surgido una hoja de ruta para fijar la agenda de trabajo conjunta para los próximos años. Ha sido Álvaro Gutiérrez, delegado de la Junta en Toledo, que es el encargado de hablar en nombre del Gobierno regional y ha anunciado que el próximo martes el Gobierno de España declarará zona catastrófica a todos los municipios afectados por las fuertes lluvias del pasado fin de semana.
Después de la reunión, Velázquezacompañado de Gutiérrez, ha comparecido para informar de este encuentro entre dos administraciones de diferente carácter pero que han manifestado el compromiso de empezar a trabajar ya, con reuniones entre los concejales y el Ayuntamiento, en las que abordar temas, por ejemplo, con el Departamento de Fomento relacionados con las comunicaciones de la ciudad.
gutiérrez Confirmó, al igual que el alcalde, que la reunión se desarrolló “en un clima extraordinario de cordialidad, un entendimiento que beneficiará a la ciudad, con el que el presidente Page está especialmente comprometido”.
En sus redes sociales, el presidente regional ha dicho que “esta es la legislatura del diálogo y mis puertas permanecerán abiertas para colaborar con todos los ayuntamientos en busca del progreso y el bienestar de toda la región”.
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