En 2007 compró electrodomésticos a la firma Veresa y no los pagó. «Por su tiempo, su situación económica y su historial médico, mi cliente quería evitar al perceptible el sufrimiento de ir a la mazmorra», explica el abogado de la empresa engañada
—¡Don Teodoro! —levantó la voz el presidente del tribunal, Juan Ramón Brigidano.
—No oigo muy admisiblemente —, respondió el anciano, de 87 primaveras, al levantarse del asiento de los acusados.
Posteriormente de una hora esperando este miércoles en el vestíbulo de la sala insigne …