Sabían lo que estaban haciendo y querían hacerlo. Esa fue la opinión de los peritos forenses que examinaron rosa pera y su ex amante Alberto Lópezcondenada a 25 y 20 años de prisión, respectivamente, por matar a su novio, Pedro Rodríguez, en mayo de 2017. Su cuerpo fue encontrado quemado en el maletero de su propio coche, en una pista forestal de la zona. pantano de foix (Barcelona). Unas semanas antes, Albert, que era agente de la Guardia Urbana, al igual que la víctima y Peral, preguntó a un compañero cómo se desharía de un cadáver para no dejar pruebas. Éste respondió que lo llevaría a un lugar aislado y le prendería fuego en el maletero de un coche, “y así pasó”, se lee en la sentencia que los declara culpables. Ella siempre ha sostenido que es inocente. – “e incapaz de matar a nadie” – y así lo reiteraron en la audiencia de apelación, donde ambos volvieron a hacer gala de las mismas acusaciones cruzadas que durante el juicio.
Ante el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC), para intentar desmontar el veredicto del jurado que les consideró culpables, Albert sostuvo que la noche del crimen llegó a casa de la familia Peral cuando Pedro ya había fallecido.. Así, alegó que al ingresar al inmueble se topó con un “escenario post-violencia de género” que había desembocado en “violencia doméstica”. Su error, señaló tras la condena, fue “callar” y encubrir el crimen. Por su parte, dijo sentirse “víctima” de su ex amante, ya que, en su opinión, todas las pruebas que existían en su contra le habían sido atribuidas a ella. Es más, En su recurso afirmó que amaba a Pedro, con quien se iba a casar y tener un bebé.. Se defendió señalando que el “único hecho irrefutable” del caso era la sangre de Pedro, que estaba ubicada en una de las habitaciones de la casa común, pero que, al encontrarse sus restos quemados en el maletero del vehículo, Sólo se pudo concluir que sufrió una muerte violenta. Un homicidio que atribuyó a López.
Fue un excursionista quien alertó al Mossos d’Esquadra tras localizar el vehículo quemado, la tarde del 4 de mayo de ese año. Una patrulla descubrió el cadáver en el interior del Golf GTI. Por efecto de las llamas, la matrícula quedó irreconocible. Desde el primer momento los investigadores barajaron la hipótesis de homicidio, pero la víctima debía ser identificada. Lo consiguieron porque, a pesar de su estado -es muy difícil identificar restos carbonizados, ya que las altas temperaturas degradan el ADN-, el cuerpo tenía unos tornillos, con un número, que habían sido colocados en una operación posterior. Esa fue la clave para saber que se trataba de Pedro, un guardia urbano de 38 años de la Unidad de Tráfico de Barcelona. y un hijo, que se encontraba de baja por dicha enfermedad. Anteriormente había sido imputado por el propio organismo municipal tras agredir a un motociclista.
Rosa defiende que fue Albert quien mató a Pedro. López le señala a Peral que la asesinó porque su pareja la maltrataba. Mientras que el fiscal calificó el crimen como una “prueba de amor diabólica y perversa” entre ambos condenados
Su identificación llevó a su pareja: rosa pera, conocido por el caso del ‘porno de venganza’. Y el agente había denunciado a un subinspector por difundir una fotografía suya con contenido sexual cuando decidió dejar la relación que mantenían. Finalmente, el comandante fue absuelto al no acreditarse que fuera el autor del envío masivo de la imagen íntima.
En ese momento, cuando se celebró el juicio, Peral ya llevaba casi seis meses en prisión provisional, acusado de matar a Pedro. Los Mossos la detuvieron, junto a Albert, pocos días después de identificar el cadáver. Ambos sospechosos habían tenido una relación sentimental en el pasado, que habían retomado, aunque Rosa seguía compartiendo su vida con Rodríguez.
tres policias
Desde el principio, el caso atrajo la atención de los medios. Todos sus protagonistas eran policías, y además, conocidos. Pedro había sido suspendido por la citada agresión y Rosa, además de la denuncia a su superior, también fue investigada, junto con Albert, por la policía. Muerte en agosto de 2014 de un vendedor ambulante.. Finalmente, un tribunal absolvió a ambos acusados al considerar que la muerte fue accidental.
el mantero Cayó por un terraplén en Montjuïc durante un operativo de Urbana contra la venta ambulante, en el que participaron los dos sospechosos. Buscaban a un individuo que acababa de robar unos móviles en la zona y, al localizarlo, según el informe, había herido a Peral en la pierna con un cuchillo. Posteriormente, el presunto ladrón habría caído desde una altura de 20 metros. Cuando lo localizaron estaba esposado. Otros dos guardias justificaron que fueron ellos quienes lo habían ‘encadenado’ porque cuando lo encontró intentó atacarlos. La pregunta en ese caso era si López podría empujar al hombre luego de que atacó a Rosa. La Justicia consideró que no.
Vida en prisión
Y fue un recluso que había compartido estancia en la prisión de Wad-Ras con Peral quien Aseguró que ella le había confesado el asesinato del mantero, algo que el citado desmintió. Servicios Penitenciarios ha tenido que trasladar a Rosa de prisión en cinco ocasiones por sus recurrentes conflictos con otros presos. En 2020, los funcionarios incluso confiscaron un teléfono móvil en su celda, a pesar de que su posesión no está permitida. Dos años antes, otros dos reclusos afirmaron que ella les había confesado que había envenenado a Pedro, mientras que Albert había acabado con él. Otra compañera de prisión negó esta confesión, al igual que la antes mencionada, pero no pudo declarar a su favor porque fue encontrada muerta en su celda, aunque le mostró su apoyo en una carta.
Fuentes penitenciarias explican que El comportamiento de Peral “no fue el más adecuado con los funcionarios». Recuerdan sus maneras “autoritarias”, acercándose más a ellos que a ellos. Durante su estancia en Brians 1 llegó a trabar amistad con la ex de Josep Maria Mainat, Ángela Dobrowolski –acusada de intentar matar al productor de televisión–, entonces también en prisión preventiva. Según los citados interlocutores, desde 2021, Peral no se ha visto involucrado en ningún altercado en prisión, donde permanece, luego de que el Tribunal Supremo confirmara su condena y el Tribunal Constitucional anulara su recurso de apelación, el mismo que el de López.
Rosa defiende que fue Alberto quien mató a Pedro por celos, porque quería estar con ella. López señala a Peral como su asesino porque su pareja la maltrataba. Mientras que el fiscal, Félix Martín, señaló el móvil sentimental del crimen, que calificó como “prueba diabólica y perversa del amor» entre ambos condenados. El jurado consideró probado que ambos agentes idearon un plan para matar a la víctima, que consistía en esperar a que estuviera “dormido o descansando” para asestarle uno o más golpes con un objeto contundente. Después utilizaron su móvil, fingiendo que Pedro aún estaba vivo y lo llevaron a las inmediaciones de la casa del exmarido de Rosa, -un mosso d’esquadra con el que tenía dos hijas y del que acababa de divorciarse-. con el fin de involucrarlo.
Uno de los aspectos más complejos de la investigación fue poder afirmar que se trataba de un asesinato, ya que, debido al estado del cuerpo -el fuego borró todas las pistas- los peritos no pudieron determinar la causa exacta de la muerte. Pese a ello, la Justicia consideró probado que lo fue, con alevosía, además, porque la víctima no pudo defenderse. En el caso de Rosa, la pena fue mayor que la de Albert –cinco años más– por el agravante de parentesco, ya que ella tenia una relacion con pedro. Respecto a la contradictoria versión de los imputados, que se atribuyeron el crimen entre sí, el Tribunal Supremo avaló que “actuaron de forma concertada a la hora de acabar con la vida de la víctima, independientemente de que solo uno o ambos fueran el ejecutor material”. “. .
Se ha escrito un libro sobre el caso, se ha emitido un documental y ayer netflix estrenó la serie ‘El cuerpo en llamas’, inspirada en el crimen, que la propia Peral intentó frenar a través de los juzgados. En su fallo, la jueza ni siquiera se planteó si la emisión de una ficción podía suponer una vulneración del derecho al honor de la condenada al no depositar el depósito exigido. Una pregunta que para su abogada, Núria González, es un despropósito, ya que Rosa está en prisión y no tiene ingresos. Sobre la petición, uno de los vicepresidentes del Ilustre Colegio de Abogados de Barcelona, Gerard de Lucas, recuerda el precedente de ‘The Crown’, una ficción basada en la Casa Real británica que ni siquiera la propia realeza logró frenar.