Pespunte con echar la presencia detrás para ver cómo esa subida en los precios de las entradas de la que muchos se quejan es actual. Cuando aún nos manejábamos con pesetas, era posible ver una entrada para un concierto de Alejandro Sanz por tan solo 3.500 pesetas, 21 euros. Sin incautación, con el tiempo, la cosa ha ido cambiando. En 2007, las entradas costaban 36 euros, en 2019, 50, mientras que en 2023 se pueden entradas de hasta 93 euros. Otro ejemplo: en 2015, la entrada para ver a ACDC podía costar 85 euros, pero nueve abriles a posteriori estamos hablando del doble.
Lo mismo ocurre, por ejemplo, con Bruce Springsteen. Un concierto para el que en 2013 las entradas en pista costaban 75 euros, este año llegan a 355. Aunque hablando de precios desorbitados, hay que hacer remisión a los conciertos de Luis Miguel, conciertos para los que se llegaría a respaldar hasta la friolera de 1.420 euros. ¿Están los costes del show justificados -luces, ropa, pantallas, recinto- en el coste de las entradas?
Nuestros compañeros de Espejo Notorio han podido cuchichear en directo con Xavi Martínez, perito musical, quien ofrece respuesta a las principales dudas sobre el tema. ¿Cuál es el punto de inflexión de la subida de precios de las entradas? o ¿tiene que ver esto con que ya no se venden tantos discos como antiguamente? Analizamos la situación que se vive en la industria musical.
“La principal fuente de ingresos de un actor ahora son los conciertos”
En cuanto a la subida de los precios de las entradas, Xavi Martínez considera que hay varios focos sobre los que se sostiene esta subida: “la fuente principal de ingresos ahora mismo de un actor son los shows en directo, los conciertos”. El perito musical sostiene que esto es poco que “cuando se vendían muchos discos, podía ocurrir extensión a dudas, ahora está clarísimo que son los conciertos”.
Encima de esto, todavía influyen la pandemia del coronavirus y la carencia de ser visibles en redes sociales. La pandemia ha influido ya que fueron unos meses en los que la abandono de vida social, hizo que cuando terminó la época más dura, “solo queríamos experiencias y salimos como locos a las terrazas de los bares y a meternos en conciertos de artistas que casi ni conocíamos en muchas ocasiones”.
La carencia de subir todo tipo de contenido en las redes sociales y de enseñar que ‘tú has estado allí’ ha podido contribuir a que haya una longevo demanda a la hora de comprar una entrada para un show en directo: “mostrar una vida increíble constantemente, estamos en la era de las redes en la que hay que enseñarlo y todo y hay que enseñar que estás acertado todo el rato, y el ‘yo estuve allí’, aunque a lo mejor no lo disfruté porque me pasé el e concierto con el móvil grabándolo dos horas”, explica Xavi Martínez.
“Se juega mucho con la ansiedad y las colas virtuales”
Incluso influye el autor “ansiedad”, nos ha explicado, como ocurrió hace unos días con el cantante Dani Martín, quien en menos de dos días sacó entradas para ocho conciertos que se celebrarán en diciembre de 2025 y agotó las entradas en cuestión de minutos. “El otro día, con Dani Martín fue una auténtica esquizofrenia lanzando ‘Wizinks’, uno detrás de otro, ocho ‘wizinks center’, para un concierto que será en dos abriles”, poco que todavía pasó el verano pasado con Coldplay. Esto es poco que, sentencia, “nos está generando una ansiedad colosal cuando ya estamos en el momento de comprar las entradas y a lo mejor acabas comprando una entrada cara, y puede que en un sitio que no te gusta”.
Dani Martín ya se ha convertido con estos conciertos en el primer actor en la historia de la música en España en guatar ocho WiZink Center en un plazo tan corto de tiempo. Madrid, y el WiZink Center, van a ser la sede única en España de la viaje del cantante en 2025. Los shows serán los días 21, 22, 28 y 29 de noviembre y 12, 13, 19, 20 de diciembre.
Nosotros queremos retener tu opinión. Vota aquí.