El Ourense CF sigue siendo un rodillo (4-1)



El Ourense CF lo ha vuelto hacer. Es un rodillo para sus rivales, una máquina perfectamente engrasada, que tritura equipos como si no le costara. Este sábado nuevo festival en un campo de Oira entregado a los suyos que daca semana va a más. No es para menos. El Valladolid Promesas fue una caricatura de equipo en manos de los de Rubén Domínguez. A los 35 minutos ya ganaban cuatro cero, y solo la expulsión del defensa Portela en el minuto 35 cambio el plan de un partido al que le sobró la segunda parte, por la superioridad de los azulones. Ahora ya nunca se sabrá, pero si no llegan a quedarse con un deportista menos y no repliegan filas, igual se vivía un resultado de escándalo. 

El recital empezó cero más comenzar a rodar la pelota. A los 3 minutos Di Renzo se va solo con destino a la puerta, sin portero y cuando iba a marcar llegó el defensa Iago Parente para sacar la pelota a córner. Era el primer aviso. No hubo más: minuto 6, pandilla derecha demoledora, empieza la marranada Andrada, se la cede a Álex Gil que se va por velocidad y centra raro para que Alberto Gil en el segundo palo envíe al fondo de la red. Minuto 10. Tocaba la pandilla izquierda. Alberto Gil para Hugo Sanz que centra y Di Renzo no perdona y con la izquierda pone el 2-0. Minuto 23. Otra vez por la izquierda y con los Gil como protagonistas. Alberto para Álex que centra raso y Facu Ballardo que llegaba desde a espaldas empuja a la red. Ver para creer. El filial no daba crédito. Facu Ballardo remató al adyacente de la red un tiro de arista y en el 35 el cuarto. Centro de Hugo Sanz en la izquierda y remate de Andrada en la derecha, los dos laterales dando otro recital ofensivo. El remate sale mordido pero Álex Gil, más astuto la manda de nuevo a la red. Era una imprudencia de partido con solo un equipo sobre el verde. Olía a goleada de escándalo, pero el fútbol es tan imprevisible que en un segundo todo cambia. Minuto 39. Portela hace una equivocación al borde del campo de acción y el colegiado le muestra la plástico roja directa. Pozo mandó la equivocación hacia lo alto, pero el partido ya iba a ser otro. 

En el alivio Rubén Domínguez puso a Riki Mangana sobre el campo por Alberto Gil. Ganaba 4-0 y no había que dar más clases. El filial vallisoletano tiro de orgullo y a los tres minutos de la reanudación Chuki, a la salida de un corner marcaba para los visitantes. Pero fue un oasis. El Ourense CF cerro el partido y tiró la grifo al Miño a su paso por Oira. Pasaban los minutos y no había cero destacable. Un par de remates de Di Renzo y Gabri Palmás para los locales y de Dani Fernández y Sergi Esteban para los vallisoletanos fueron lo más destacado. El pescado estaba todo vendido y los dos pensaban ya en la próxima semana.

Leave a Comment

Your email address will not be published. Required fields are marked *