Los funcionarios bloquean las cárceles por el asesinato de una compañera


La semana pasada un preso habría terminado con la vida de una funcionaria de prisiones del Centro Penitenciario de Mas d’Enric, situada en El Catllar, Tarragona. La trabajadora se llamaba Nuria, tenía 48 abriles, y ejercía como jefa de cocina en esta gayola, y era presuntamente asesinada por uno de los internos, que se suicidaba luego.

Desde el día de los hechos, funcionarios de prisiones a lo dilatado de toda España celebran numerosas concentraciones de apoyo a Nuria y su comunidad así como manifestaciones, paros e intentos de obstrucción en los accesos a varias prisiones y confinar a los reclusos en sus celdas.

Barricadas en llamas

La tensión, allí de rebajarse, en los últimos días ha ido en aumento. Las barricadas ardían a las puertas de algunas cárceles e incluso se producían varios encontronazos entre las fuerzas de seguridad y los manifestantes, que afirman observar gran “indignación y cada día va subiendo más el termómetro”.

Se quejan de que sus vidas corren peligro mostrando fotografías de lesiones supuestamente producidas por alguno de los internos y de algunas armas en sus manos. Una de las funcionarias presente en una concentración para exigir más protección aseguraba que en alguna ocasión habrían recibido como respuesta que “si recibíamos agresiones es porque éramos unos negligentes y unos incompetentes haciendo nuestro trabajo”.

Las cárceles catalanas, un polvorín

En Cataluña la situación reviste una extrema compromiso ya que, desde el crimen de Nuria, los presos continúan recluidos sin salir de sus celdas, sin posibilidad de tomar visitas. Este panorama mantiene muy preocupadas a las autoridades legado que podría desembocar en hechos de maduro compromiso: “Es una situación preocupante porque afecta a derechos y a la seguridad de internos”.

“Una situación prebélica”

El periodista de Espejo Manifiesto, Miquel Valls, explica como muchos periodistas estarían recibiendo los testimonios e incluso imágenes, de los presos y la situación del interior de las prisiones. Hechos que como explica la abogada criminalista, Beatriz de Vicente, supondrían una infracción pesado en el interior de los centros, pero al mismo tiempo reconoce los graves momentos que atraviesan: “Lo que están denunciando es que no les dejan salir de sus celdas. Obviamente no se les puede aplicar un régimen de aislamiento cuando no hay una excusa que lo justifique. A lo que hay que sumar que un régimen de aislamiento tiene una temporalidad limitada. Tienen que poder salir, tomar las visitas, etc.”

En contraposición la letrada aclara que “ahora hay una situación casi ‘prebélica’ en los centros penitenciarios”, y denuncia “la desatiendo de seguridad de los trabajadores, de personal, de medios…”.

Leave a Comment

Your email address will not be published. Required fields are marked *