Las vírgenes de Pedro Sánchez


Kids es una película controvertida, que dirigió en 1995. Larry Clark. La película cuenta un día en la historia de unos jóvenes de Nueva York y sus relaciones con el alcohol, las drogas y el sexo. Los principales protagonistas son Telly y Jennie. Telly es un joven que sólo quiere hacer el amor con vírgenes y Jennie es una de sus conquistas, quien no deja de preguntarse por qué la cariñosa Telly parece haber olvidado la vez que le hizo el amor. La parte dramática de la película comienza cuando Jennie descubre que Telly la ha infectado con SIDA y tiene que localizarlo lo antes posible para decírselo.

Las falsas promesas de amor, olvidarlas cuando se ha conseguido el propósito, poner dicho objetivo por encima de cualquier consideración son la parte central de la película, pero también podría ser la historia del socialista. Pedro Sánchez camino de su toma de posesión como presidente del Gobierno español. Sánchez no tiene problemas en mostrarse cariñoso y convincente en sus promesas. A muchos les gusta el nacionalista vasco Ortúzar Cayeron al primer vistazo y ahora mismo se preguntan por qué ya no les prestan atención y nadie les pregunta qué van a hacer en futuras votaciones. Nadie le pregunta porque el incompetente Ortuzar puso sus cartas boca arriba y se lo negó Feijóo cualquier posibilidad de acuerdo, en lugar de mantener el tradicional pragmatismo que siempre ha caracterizado al PNV. Ahora que han perdido la virginidad con Sánchez ya no interesan, son una muesca más en la cabeza del líder socialista. El PNV sólo ve cómo a partir de su inutilidad van a ser superados por Bildu y ver con terror cómo quien los desfloró vota con los partisanos para sacarlos del poder. Ese día no brindaré, pero estoy seguro de que una sonrisa aparecerá en mi rostro.

Lo mismo les ha pasado a los republicanos catalanes de ERC. Fueron los primeros en ser desflorados por Sánchezpero todavía creen eso de amor eterno y confían en que el presidente Sánchez les convocará el referéndum, mientras siguen perdiendo votantes por la carga.

Sabiendo cómo les ha ido, Puigdemont Ella no confía en él y quiere tener garantías antes de entregar su virginidad a Sánchez. Sabe que el día que lo haga Sánchez lo dejará pasar. Su amnistía, sus indultos y sus referendos de independencia quedarán en el olvido si no los consigue antes de votar sí a Sánchez. Eso es lo que se siente ser un “cambiador de opinión compulsivo” en el que nadie confía.

Sánchez se siente ganador, mientras PP y VOX siguen en un laberinto que probablemente les impida mejorar sus resultados en caso de una posible elección anticipada. Sánchez puede presionar a Puigdemont para que cualquier cosa que no sea su toma de posesión como presidente será mala para los separatistas y para las esperanzas de libertad del fugitivo.

De Compromisos Nadie sabe nada, van a perder una oportunidad de oro para reivindicar el nacionalismo valenciano. Ya todo el mundo sabe que Compromís es un apéndice, lo que genera dudas es si son del PSOE, de Sumar, de ERC o de ninguna parte.

Volviendo a la película niños, termina mal. En su carrera por evitar que Telly siga contagiando a más jóvenes, Jennie llega a una fiesta, donde, drogada, es violada por uno de sus amigos. A la mañana siguiente, se siente avergonzado y pregunta: “Dios mío, ¿qué pasó?”.

Me temo que todos los españoles pensarán en esto, especialmente los que han votado a Sánchez, dada la deriva que previsiblemente tomará nuestro país cuando nos gobiernen Sánchez y su pandilla.

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