Miguel nos dice que lo llamemos Mike, como empezaron a hacer sus amigos cuando empezó la universidad. Su carrera dista mucho de lo que ha acabado dedicándose, la Biotecnología. Aunque nos cuenta que siempre le ha atraído el mundo del emprendimiento y también la edición de vídeo.
El primero que grabó sigue la misma línea que le ha llevado al éxito, el videojuego minecraft. Un juego de estrategia que consiste en crear espacios y cumplir misiones con figuras cúbicas. Nos admite que le da vergüenza volver a ver ese vídeo, aunque le alegra ver cuánto ha mejorado.
“Siempre he sentido que era diferente al resto“, también la sensación de compartir con otros sus temas de interés. Cuando terminó la carrera, decidió probar suerte. Se dio un año para lograr algunas metas en YouTube y acabó superándolos con creces. Cuando se le pregunta qué habría hecho si no llegara esa esperada victoria, se sincera, “buscaría un trabajo mío normal, en un laboratorio… con abrigo”. Sin embargo, cuando era sólo un niño, esos no eran sus objetivos. “guardabosques, hombre mono y veterinario” eran los trabajos de sus sueños. Ahora puede abordar esas profesiones desde su personaje de “Mike el Perro”, una “extensión de sí mismo”, con sus virtudes y defectos exaltados “por encima de todos los defectos”.
Su último proyecto es un show en vivo”MikeCrack y la súper arma secreta“. Asegura que es un formato muy especial que sorprenderá a todos uniendo música, teatro, animación y muchas risas. Su gira comenzará en noviembre en Sevilla y recorrerá 23 ciudades como Avilés, Pamplona, Cáceres o Albacete.