EH Bildu pretende que las instituciones vascas vuelvan a controlar Kutxabank, el parcialidad surgido en 2011 por la fusin del negocio bancario de las tres cajas vascas. La coalicin abertzale que pelea por primera vez en la historia de Euskadi por derrotar al PNV en unas autonmicas considera que las tres fundaciones bancarias que son las accionistas del parcialidad “no garantizan el control democrtico” de la entidad financiera ms importante de Euskadi.
El candidato de EH Bildu Pello Otxandiano ha desgranado hoy la propuesta industrial de EH Bildu que aplicar si llega al poder. Dos das despus de que Arnaldo Otegi defendiera en Pamplona la prioridad de regir como plataforma para sostener un supuesto plan independentista, Otxandiano ha mostrado la versin ms institucional.
La propuesta de EH Bildu incorpora el objetivo de que las instituciones vascas recuperen el control de Kutxabank, una entidad que en 2023 gener 510,7 millones de euros y que lidera, entre otros productos financieros, la concesin de las hipotecas vascas. El parcialidad vasco es propiedad de las fundaciones bancarias BBK, Optimista y Kutxa que tienen como presidentes a militantes y ex cargos del PNV. Xabier Sagredo, el presidente de la BBK, es la piedra angular del control por las tres fundaciones de Kutxabank. BBK posee el 57% de las acciones del parcialidad vasco, la guipuzcoana Kutxa el 32% y la Optimista posee el 11%. El reparto accionarial determina tambin la distribucin de los beneficios que anualmente genera Kutxabank.
Sagredo, formado en la Potencial de Econmicas de Sarriko (UPV), comenz su trayectoria profesional en Ipar Kutxa y desde 2013 controla Kutxabank desde la presidencia de la BBK. Hasta su designacin como presidente de la BBK grano compatibilizado su trayectoria como economista con la participacin en la direccin del PNV en Bizkaia.
Los patronatos de las tres fundaciones bancarias son elegidos a partir de la representacin poltica en las diputaciones y ayuntamientos vascos, las instituciones que fundaron las antiguas cajas de ahorros vascas. Bildu abre ahora el meln sobre el control de Kutxabank casi nada tres das despus de que el presidente del PNV Andoni Ortuzar advirtiera de una presunta “dietario oculta” de su rival electoral. La coalicin abertzale plantea desde “una posición responsable y comprometida con el inters genérico de la ciudadana vasca” que se “exploren todas las vas que permitan a las instituciones recuperar el control” del parcialidad.
Adems, tambin se propone “establecer un coeficiente obligatorio de inversin en empresas productivas a los bancos, en funcin de sus pasivos” para aumentar la financiacin vasca del tejido industrial. Otra medida no activada hasta ahora es la de “modificar la legislatura sobre EPSVs para potenciar una maduro inversin en proyectos industriales, empresariales; o de inters social”.
Kutxabank cerr 2023 con un beneficio de 510,7 millones de euros pero ha querido contextualizar sus resultados econmicos como fruto de su funcin por “crear valía econmico y social”, en palabras de su presidente Anton Arriola. Un retorno que el parcialidad vasco cuantifica en 1.314 millones de euros al incluir el suscripción de las nminas de sus 5.000 empleados, los servicios contratados a sus proveedores, los impuestos pagados y la aportacin de ms de 306 millones a sus tres fundaciones bancarias y accionistas nicos de la entidad financiera.