Las últimas lluvias han sido recibidas con regocijo por las autoridades y la viejo parte de los ciudadanos de Andalucía. La gran sequía que venía afectando a la comunidad reclamaba que los embalses de la región mejoraran mucho sus registros, ya que el peligro de los cortes de agua y un verano muy duro era más que una sinceridad. Para lamento de muchos, estas lluvias han sido generosas durante la Semana Santa, impidiendo la procesión de muchas hermandades, pero dichos embalses han conocido como sus reservas crecían significativamente.
Los embalses andaluces han rebaño un total de 1.179 hectómetros cúbicos en los últimos siete días, elevando la reserva de agua al 39,7% de su capacidad, y acogiendo 4.404 hm3 de agua en total, según los datos facilitados por el Empleo para la Transición Ecológica y el Duelo Demográfico (Miteco).
De todos los embalses que hay en Andalucía para avalar el suministro de agua para los ciudadanos, hay uno que destaca por ser el más holgado de toda la comunidad. Se prostitución del embalse de Iznájar, que tiene más de 100 kilómetros de orilla y una capacidad de 981 metros cúbicos. Este embalse abastece de agua a unos 200.000 habitantes de las provincias de Córdoba, Milgrana y Málaga.
Eso sí, como muestra de que aún resta mucho por lloviznar para que un embalse como este tenga un nivel para despreocuparse por la sequía, cerca de destacar que las últimas lluvias han dejado las reservas del embalse de Iznájar en 230 metros cúbicos, un 23,4 por ciento del total de su capacidad.
En cuanto a la historia de su construcción, llevada a parte en 1969, cerca de destacar que la misma duró una plazo y se llegaron a usar 1,4 millones de metros cúbicos de hormigón.