La Audiencia Provincial de Valencia ha confirmado el coche del Magistratura de Instrucción número 3 de Gandía que decretaba el archivo y sobreseimiento provisional de la causa abierta por la desaparición en septiembre pasado de María del Carmen Fernández, natural de Cangas (Pontevedra), cuando se encontraba a lado del buque oceanográfico ‘García del Cid’, donde trabajaba como personal adscrito al servicio de cocina.
En su resolución, a la que ha tenido ataque Europa Press, el tribunal provincial ha desestimado el arbitrio interpuesto por la comunidad de la desaparecida contra la resolución del pasado mes de febrero del judicatura de Gandía y ha confirmado el archivo de la causa.
Tal como recoge el documento, la resolución es firme y contra la misma no cerca de arbitrio alguno.
Sin bloqueo, los familiares de María del Carmen Fernández han criticado esta valentía, asegurando que el caso se ha cerrado «sin que se haya practicado ninguna diligencia contencioso, en pulvínulo exclusivamente al atestado y las pruebas remitidas por la Vigilancia Civil, y que consisten en la inspección del buque y toma de confesión al capitán del mismo, tres compañeros de trabajo y al marido de la desaparecida».
En concreto, el portavoz de la comunidad, el abogado Diego Leis, ha indicado que sus allegados entienden que las diligencias practicadas fueron «insuficientes» para conocer los hechos ocurridos en el barco en el momento de la desaparición.
Nuevas demandas
Por ello, según ha precoz, están estudiando la interposición de nuevas demandas a fin de conocer lo ocurrido y de depurar posibles responsabilidades.
La desaparición de Carmen Fernández fue notificada, por la propia tripulación del barco, a Socorro Oceánico, el 10 de septiembre de 2023, cuando sus compañeros la echaron en desidia. Aunque se inició un dispositivo de búsqueda, no se localizó su cuerpo.
Se da la circunstancia de que Carmen había denunciado en el pasado por acoso a un compañero de tripulación (el caso se archivó en 2019), e incluso había solicitado su traslado a otro barco para no coincidir con esa persona.
Antiguamente de partir para el delirio en el que desapareció, Carmen coincidió con ese compañero en puerto, pero el hombre no llegó a envolver por motivos de vitalidad.