Pese a este aumento en la demanda, las empresas no pueden contraer la totalidad de los pedidos por la equivocación de personal en el sector de la construcción. Esto provoca plazos de dilación de entre seis meses y un año para iniciar las obras en las viviendas. “Es habitual que tengamos que repeler algunas peticiones de reformas o darles un plazo de obra muy espléndido”, reconocen desde Empresa Nieto. En esta término, desde el Categoría Antolin indican que “se vivió un bum de demanda de reformas a posteriori de la pandemia, que se ha ido estabilizando poco a poco”.
El tiempo más o menos para realizar una reforma, según señalan desde Categoría Antolin, es de unos tres meses “si se tráfico de una reforma integral, la cual conlleva una reestructuración completa del espacio total de la vivienda, que incluye acabados, carpintería interior y foráneo, instalaciones de climatización, agua caliente, electricidad y calefacción” y de dos o tres días en el caso de las reformas menores.
Santiago Ferreiro, presidente de la Asociación de Empresarios de Construcción de Ourense, señala dos factores secreto en este aumento de la demanda: la aparición de los fondos Next Generation con ayudas para rehabilitación, la perfeccionamiento de la eficiencia energética de las viviendas y la equivocación de vivienda nueva. “Prácticamente, el 80% de las operaciones de compraventa en la provincia son de vivienda usada que en la mayoría de los casos necesitan rehabilitación”, explica.
En este sentido, Ferreiro considera que asimismo influye que “el año pasado, en un entorno impresionado por el incremento de los tipos de interés, Ourense fue de las escasas provincias donde aumentó la compraventa de vivienda, un 5,6%. Incremento que contrasta con la declive del 12,4% en la comunidad gallega y del 9,7% en el conjunto de España”.
Yerro de personal
El sector de la construcción no está consiguiendo contraer este bum en la demanda de reformas por la equivocación de personal. “El principal problema es enfrentarse a la ardua bordadura de búsqueda de personal cualificado para acometer los trabajos en este sector, sumado a la subida y plazos de entrega de los materiales de construcción”, señalan desde Categoría Antolin. “Es muy complicado encontrar personal, necesito tres trabajadores más y no los consigo”, afirman por su parte desde Gateco Reformas.
Los problemas de personal, según la opinión de Categoría Antolin, se producen por el envejecimiento de la población y la equivocación de licencia generacional, ya que las nuevas generaciones “optan más por puestos en el sector divulgado y no tanto por la empresa privada”. Para Miguel González, trabajador de Edinor, esta escasez de trabajadores se debe principalmente “a que hay clan poco cualificada y con pocas ganas de instruirse”.
Ferreiro explica que “venimos de firmar el convenio provincial con un salario exiguo de 1.363,12 euros para el año 2024, encima de incluir el primer plan de pensiones sectorial y una viaje anual de 1.736 horas”, aunque recalca que la equivocación de personal no es un problema exclusivo de la construcción, sino que afecta asimismo a otros sectores.
En este sentido, el catálogo de ocupaciones de difícil cobertura del Servicio Conocido de Empleo Estatal indica que entre las profesiones más complicadas de cubrir en la provincia se encuentran los carpinteros de aluminio, metálico y PVC, los montadores de carpintería, los instaladores electricistas o los conductores-operadores de cabrestante.