Piden más de 30 años de cárcel a un hombre por intentar quemar a una pareja con ayuda de su mujer


Continúa el seso contra un hombre y su mujer acusados de incendiar el rellano de un edificio de Manresa (Barcelona) presuntamente para intentar matar a una pareja. Testigos aseguran que los acusados se presentaron en la vivienda el día susodicho amenazando con una botella de gasolina.

La fiscal reclama 32 primaveras de gayola para el principal dibujado, que está en prisión preventiva, y 19 primaveras de prisión para la mujer, acusada en calidad de cooperadora necesaria. Sobre las 22:00 horas del 10 de abril de 2022 que el dibujado se presentó frente a la puerta del tierra de las víctimas. En ese momento solo estaba la mujer en casa y el dibujado, que vivía en el mismo edificio, le preguntó: «¿Dónde está tu marido? Que lo voy a matar», ha evidente la mujer en el seso que ha empezado este miércoles en la Audiencia de Barcelona.

La mujer llamó al 112 por el incidente de la confusión, y a la mañana sucesivo, el dibujado volvió al tierra de las víctimas -donde igualmente estaba el bebé de la pareja, que tenía 17 días– presuntamente compinchado con la acusada para conseguir entrar el domicilio.

Las dos víctimas han explicado que la acusada rompió la puerta y preguntó dónde estaba el bebé, pero no llegó a entrar al tierra, y a continuación el hombre, que esperaba en el rellano, corrió con destino a ellos con un cuba de gasolina, los roció y les prendió fuego con un mechero.

«Se la comía el fuego»

«Vi como a mi mujer se la comía el fuego», ha explicado el hombre al tribunal. Asimismo que posteriormente varios vecinos les ayudaron a apagar las llamas antiguamente de que llegara la policía.

El hombre ha contado que el dibujado le había llamado días antiguamente por teléfono insultándolo y provocándolo para que pelearan: «Los insultos eran frecuentes y me decía ‘te voy a derrochar’», y al preguntársele por qué el dibujado estaba enfadado con él ha explicado que el hombre quería plata a cambio de que ellos pudieran radicar en ese tierra.

«Se dirigía con destino a mí, el objetivo era yo», ha dicho el hombre antiguamente de señalar al tribunal las cicatrices que tiene detrás de las orejas, en los pies, la espalda, los brazos y la cara.

Testigos

Cuando la acusada presuntamente rompió la puerta del tierra, la mujer que vivía allí estaba en el dormitorio con su bebé, salió al escuchar el ruido y igualmente quedó rociada por la gasolina.

Asimismo han evidente en la primera marcha de seso dos testigos, vecinos del edificio: uno vio al dibujado el día susodicho con el cuba de gasolina y el otro, que era compañero de tierra del dibujado desde hacía cuatro primaveras, ha explicado que ayudó a apagar el fuego unido a otros vecinos. El proceso jurídico ontinuará el jueves, cuando están previstos los interrogatorios a los acusados.

Leave a Comment

Your email address will not be published. Required fields are marked *