Fue el concejal del PP Antonio Melo quien simuló extrañarse de la presencia de los trabajadores ocupando los asientos del conocido e ironizó si la presencia de agentes de la Policía Lugar obedecía a que se esperaba un pleno “caliente”. El corregidor socialista, Alfredo García, le sacó inmediatamente del equívoco, comentando que “serán outros problemas que tentaremos resolver. É un tema moi complexo”.
Inmediatamente, Antonio Melo salió al paso de la mención. “Llevo oyendo las tres humanidades famosas desde que entré”. Con su intervención puso sobre la mesa una RPT que lleva abriles sobre la mesa y que no había popular el corregidor, pasando este a informar de las diferentes reuniones y propuestas a los sindicatos. “Enviamos un documento novo que recolle moitas das peticións para que fagan observacións”, dijo Alfredo García. El regidor pidió flexibilidad para afrontar un “problema que teremos que resolver chegando a un acordo”, reconociendo seguidamente que “hai moitos traballadores que veñen de subvencións que están moi mal pagados. O Concello é consciente de esa inxustiza” y añadió que “tódolos traballadores van mellorar”, eso sí, teniendo en cuenta que “o Concello funciona en boa medida con impostos e tasas dos veciños”.
El “problema” surgió en los ruegos y preguntas de una sesión que comenzó con el anunciado incuria de la Corporación del que fue portavoz del BNG, Xesús Vilasánchez.
Aprobadas inversiones por 2,7 millones
El pleno aprobó la asignación de más de 2,7 millones de euros del remanente de Gobierno a inversiones en infraestructuras y prosperidad de servicios. Repartida en un crédito extraordinario (1,27 millones) y un suplemento de crédito (1,42 millones), salió delante con los votos a patrocinio del equipo de gobierno socialista y la contención del BNG en los dos casos, optando el PP por el apoyo y la contención, en los dos puntos.
El corregidor dio por finalizado el pleno luego de un abundante apartado de ruegos y preguntas que provocó el enfado de la concejal del BNG Noa Fernández, quien recordó que en este capítulo “non hai lado ao debate, non se pode sufragar”. La respuesta del corregidor fue tajante: “O pleno o dirixo eu” y abogó por dar facilidades. Finalizó la concejala defendiendo la billete de los ciudadanos en los plenos.