En esta ciudad tenía empleo la final de la Supercopa turca entre los dos equipos más grandes del país: el Fenerbahçe y el Galatasaray, sin bloqueo, esta solo pudo durar un minuto luego de que los primeros abandonaran el dominio de equipo rápidamente en señal de protesta.
Fenerbahçe alineó a los sub19 y dejaron el campo en el minuto 1
Ya de entrada el equipo turco decidió alinear a sus jugadores sub-19 a pesar de ser uno de los partidos más importantes de la temporada en presencia de su principal rival. No obstante, el tempranero gol de Icardi a los 50 segundos lo aceleró todo y antaño de que el Fenerbahçe pudiera sacar de campo su preparador hizo un mueca a sus jugadores para marcharse el césped y marchar directamente a vestuarios en presencia de los pitos de la tribuna y los irónicos aplausos de sus rivales.
No viajaron aficionados del Fenerbahçe
Al estadio, por otra parte, solo acudieron los seguidores del Galatasaray, por lo que prácticamente la fracción del perímetro estaba vano. Frente a la retirada del Fenerbahçe el árbitro no tuvo otra opción que no fuese darles la final por perdida por un 3-0.
Pidieron el aplazamiento de la final pero no se les concedió
El mítico equipo turco cumplió su amenaza y terminó ‘boicoteando’ la final de la Supercopa como protesta por lo que consideran un trato injusto y extraordinario por parte de la Convenio Turca por no favor prestado atención a su petición de prorrogar la final a otra vencimiento y otro tablado (el partido de ayer tuvo empleo a 1.000 km de Estambul). Y es que el Fenerbahçe pidió a la Convenio este aplazamiento ya que el próximo jueves tendrá que delirar a Grecia para disputar la ida de cuartos de final de la Conference League en presencia de el Olympiacos que dirige José Luis Mendilibar.
El organismo se negó y desde entonces el conjunto turco directamente decidió que sus jugadores no viajarían a la final y lo harían en su empleo los jugadores sub-19, por otra parte de que siquiera había aficionados suyos en las gradas.
En cambio, tras lo sucedido, el mandamás y presidente del Fenerbahçe Ali Koç fue más allá: “Nuestra sublevación de hoy, nuestra postura en la Supercopa, no tiene ausencia que ver con la vencimiento del partido ni con lo que pasó en el final partido fuera de casa”, empezó diciendo.
“El intento de homicidio de nuestro equipo de fútbol…”
“Las injusticias que vivimos, las conspiraciones de la estructura terrorista, el intento de homicidio de nuestro equipo de fútbol, el intento de lapidación de nuestros futbolistas en nuestro final partido fuera de casa, nuestros campeonatos que fueron robados por la fuerza… Uno de los factores que más nos duele y nos hace cuestionar nuestra situación contemporáneo es que ‘el intento de homicidio’ que aún sigue sin resolverse. La directiva además quería retirarse temporalmente de la coalición y posponer los partidos…”, concluyó.
Esta postura se vio afianzada tras la vergüenza del Papara Park, estadio en el que hace casi un mes aficionados del Trabzonspor invadieron el campo y agredieron a los jugadores del Fenerbahce en lo que se convirtió en una batalla campal.
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