Emiliano García-PageEl presidente de Castilla-La Mancha, ha vuelto a alzar la voz contra el Gobierno en funciones y su decisión de estudiar una posible amnistía para lograr el apoyo de Junts en una futura investidura de Sánchez. El dirigente manchego no entiende cómo se puede cambiar de opinión en apenas unas semanas y pasar de decir que “la amnistía no entra en la constitución” a ponerla sobre la mesa de negociación.
«El presidente del Gobierno y todos sus ministros se han cansado de decir que la amnistía no encajaba en la Constitución y esa fue la respuesta que se le dio continuamente a ERC. Que eso cambie de un día para otro es enormemente grave.», dijo hoy García-Page tras un suceso. Un cambio de opinión que el manchego cree “habrá que explicarlo o aclararlo”, ya que “No han pasado ni dos meses de las elecciones generales a las que el PSOE y todo el Gobierno acudieron con la proposición de que la amnistía no encajaba en la Constitución».
Aun así, García-Page reconoció que No habéis oído al presidente decir que está a favor de la amnistía. “Lo último que dijo fue que no encajaba en la Constitución, si dice otra cosa…”, afirmó el presidente regional, quien reconoció su preocupación por la situación que mantiene enfrentados a los españoles.
«Debemos superar esto un debate algo sobre la guerra civil que se está generando. Creo que las soluciones nunca vendrán de los extremos. Tienen que venir de las opiniones más moderadas y ese es el espacio en el que algunos vamos a insistir para que no se pierda en España. Porque si no estamos condenados a que una mitad esté en conflicto con la otra mitad. Además, este no es un debate de izquierdas o derechas, porque quiero recordar que Puigdemont es la derecha catalana, más que el PP, y rival de los socialistas catalanes. En términos económicos, Puigdemont se entendería mejor con Aznar que con nosotros”, afirmó García-Page, en un intento de resaltar las diferencias de Junts con el PSOE.
Sobre la manifestación convocada por el PP para el fin de semana del 24 de septiembre, García-Page afirmó que Es un llamado “legítimo”pero no tenía intención de ir.