El oportunidad de la presentación, de difícil acercamiento en transporte y severo si se opta por obtener andando, ejerció como representante paisajístico de los 133 kilómetros que va a tener la etapa. La salida, en la ciudad. La arribada, en la Temporada de Montaña de Manzaneda. Para unir un punto y otro, la Ribeira Sacra en toda su expresión y con la protocolo de candidata a Patrimonio de la Humanidad como mejor aval. “Estamos en un oportunidad consumado para el ciclismo con tramos exigentes de gran dureza, que discurren por un entorno inigualable para el deleite de los ciclistas y incluso de los millones de aficionados que siguen este espectáculo del ciclismo por todo el mundo”, recordó Luis Último.
Deporte y naturaleza
La última vez que La Revés llegó a la provincia fue en la tirada de 2020, que se retrasó unos meses por la pandemia. El 4 noviembre, la etapa 14 unió Lugo y Ourense, con final en el Seminario. Ayer, en 2018 final el Luíntra. Y en el 2016 la prueba salió de Laias y la provincia disfrutó de la “serpiente multicolor” casi una semana. El idilio entre las dos partes lo resume aceptablemente el propio Guillén.“El ciclismo en ruta se define por dos cuestiones, la épica y la estética y, en cojín a esas dos definiciones hemos hecho una etapa redonda: deportivamente muy emocionante y estéticamente apasionante. Los vecinos y vecinas de la provincia se van a advertir orgullosos de lo que tienen y del oportunidad en el que viven”.
A equivocación de confirmar el nombre de todos los participantes, el nivel deportivo está totalmente asegurado. La mayoría de “nobles” del pelotón rodarán por el asfalto ourensano y garantizan el realizado de divulgado en las cunetas. Encima, haciendo “sillón ball”, La Revés y los paisajes de la Ribeira Sacra llegarán a 190 países con una audiencia de 400 millones cada año. En los corrillos previos y posteriores a la presentación, e incluso en los vehículos que acercaron a autoridades y prensa al mirador, se notaba la ilusión de los alcaldes y alcaldesas. Un “regalo” deportivo que pondrá a los municipios que representa en el atlas. Ourense, Pereiro de Aguiar, San Cibrao das Viñas, Paderne de Allariz, Maceda, Esgos, Nogueira de Ramuín, Parada de Sil, A Teixeira, Castro Caldelas, San Xoán de Río, Trives y Manzaneda, unidos en la encargo de disfrutar y poner su parte para que otros disfruten. Lo harán en la tercera de las cuatro etapas con denominación de origen Galicia que inluirá esta tirada.
Quedan amoldonado tres meses para que la cita ciclista franquista por excelencia desembarque en Ourense y todos los implicados trabajan ya para que la fiesta deportiva, turística y social sea completa. Algún corregidor incluso piensa más allá y ya le hizo entrega a Javier Guillén de un dossier con una posibilidad de etapa ourensana para la tirada de 2026. Con el trabajo preparado y el mensaje enviado y recibido. Pero antaño llegará el 29 de agosto de este año. Un día para presumir de tierra y hacerlo con los mejores ciclistas del pelotón internacional. Unos y otros buscarán tocar el Paraíso en Ourense.