Google niega pagos de hasta 12.000 millones de dólares a monopolizar el negocio de los motores de búsqueda. Afirman que son los usuarios quienes los eligen frente a otros buscadores. El litigio se lleva a cabo en Washington, en el Tribunal del Distrito de Columbia. Durará unas 10 semanas. Además, 38 fiscales generales estatales se han sumado a la acusación. Altos ejecutivos tecnológicos, ingenieros, economistas y académicos participan del caso con sus testimonios. El gigante tecnológico ha movido ficha y ha contratado John Schmidtleinun abogado que participó en el último gran caso de monopolio, para liderar su defensa.
Una defensa prestigiosa y experimentada en casos de monopolio.
Schmidtlein lidera la defensa de Google. Es copresidente de Williams y Connolly, una firma de abogados especializada en la práctica de juicios civiles y penales antimonopolio. Participó en el juicio de microsoft en 1998. En la audiencia del martes señaló que “Google ciertamente no es el guardián de Internet”. Destacó que “las pruebas demostrarán” que los demás buscadores “fueron derrotados en el mercado”. Si la empresa compite con otras y se impone es por “méritos propios”. Además, contrataron a cientos de personas, tres prestigiosos bufetes de abogados y pagaron millones de dólares en honorarios.
Por su parte, Kent Walker, presidente de Asuntos Globales de Alphabet (la empresa matriz de Google), insiste en que la gente utiliza el motor de búsqueda “porque es útil”. Habla de una demanda “profundamente defectuosa”. “Planeamos demostrar en el juicio que nuestros acuerdos de distribución de búsqueda reflejan las elecciones de los navegadores y fabricantes de dispositivos en función de la calidad de nuestros servicios y las preferencias de los consumidores”, alegó Walker en un comunicado. La empresa insiste en su premisa principal: Cualquiera que quiera cambiar de motor de búsqueda puede hacerlo.
La acusación de Estados Unidos
La investigación contra Google comenzó durante el mandato de Donald Trump y continuó con Joe Biden. El subdirector de la división civil del Departamento de Justicia, Kenneth Dinter, declaró el primer día del caso que “Google mantuvo ilegalmente un monopolio durante más de una década”. Según la demanda, Google provocó que muchos consumidores tuvieran dificultades para utilizar otros motores de búsqueda de Internet.
el juez federal Amit P. Mehta, que fue designado para el cargo en 2014 por el presidente Barack Obama, será quien dicte sentencia en este juicio sin jurado. Jonathan Kanter, fiscal general adjunto antimonopolio del Departamento de Justicia, se encuentra entre un grupo de críticos progresistas de las grandes empresas tecnológicas a quienes Biden ha colocado en altos cargos gubernamentales encargados de hacer cumplir la ley. Leyes antimonopolios.