Todos los ingredientes climáticos señalados en el titular son los que más se identifican, aunque hay abriles con excepciones, en la celebración del Corpus Christi. En la renta toledana, como mayor modelo de esta fiesta religiosa, aunque hay otros lugares además de interés como Camuñas o Lagartera, son lo que definen este año su cita más importante en el calendario. La zona histórica de Toledo ha sido en la tarde-noche de hoy un hervidero de parentela que de la mejor forma tuvo que soportar la importante subida de la temperatura, poco que hoy volverá a producirse durante la procesión, pero que sin duda da más luz y autenticidad a la fiesta que se vive en la calle.
Durante su décimo por la mañana en la ofrenda floral con cientos de escolares de 18 colegios de la ciudad, el corregidor de Toledo, Carlos Velázquez, afirmó que «mañana Toledo volverá a predominar más que el sol», gracias a la conjunción de muchísimas cosas. Y así, Velázquez ensalzó la amplia décimo de la sociedad toledana para que esta fiesta sea un efectivo éxito y tuvo un distinto remembranza para los trabajadores que se afanan en estas últimas horas «para que Toledo sea la ciudad más bonita del mundo». Todavía para los floristas venidos de todas las partes de España, que hacen que «nuestras calles gocen de una tramoya única».
Miles de personas han disfrutado en las calles del casco antiguo
Por su parte, el prelado de Toledo señaló que estos días Toledo se convierte en la renta del mundo de la Eucaristía y de la belleza, con la contribución que hace toda la parentela de Toledo que se vuelca con su fiesta.
Por zaguero, Velázquez invitó a todas las personas a que disfruten al mayor del Corpus, y ha afirmado que es un honor y una responsabilidad, representar como corregidor a toda la ciudad y salir en la procesión.
Como es la tradición, en la tarde de este miércoles las calles del casco antiguo se llenaron para ver el desfile de la ‘Tarasca’ y los gigantones, con miles de personas paseando por sus calles contemplando una tramoya espectacular.
Mañana jueves, día egregio de la fiesta del Corpus, a las ocho de la mañana se oirá el disparo de las bombas reales, seguido del desfile de gigantones y la ‘Tarasca’. A las diez de la mañana comenzará la ofrenda solemne en la catedral por el rito mozárabe y una hora posteriormente comenzarán a salir a las calles las cofradías, hermandades, capítulos y las diferentes instituciones en la larga procesión, cuyo centro lo constituye la magnífica gema que es la Custodia de Arfe.