El Gobierno introducir un examen tipo test entre las pruebas de la oposicin a la Inspeccin educativa. Es la primera vez que aparece este formato en el proceso de seleccin de cualquiera de los cuerpos docentes. Tanto los inspectores como los maestros, los profesores o los catedrticos haban tenido hasta ahora pruebas prcticas o de ampliación del temario, pero nunca antaño el cuestionario se habón utilizado como utensilio para evaluar el entrada a la funcin pblica docente.
Eso cambiar cuando se apruebe el plan de verdadero decreto por el que se regula la Inspeccin educativa, al que ha tenido entrada EL MUNDO, que contempla entre sus novedades un cuestionario de entre 30 y 45 preguntas que sustituir al presente examen escrito de ampliación sobre cuestiones referentes a la organizacin curricular y escolar, la gestin de centros o la legislacin bsica, lo que se conoce como la parte A del temario.
El resto de las pruebas se mantiene como estaba: seguir habiendo la exposicin hablado de un tema sobre la parte B del temario y continuar la prueba prctica por escrito (por ejemplo, hacer un documentación de Inspeccin). Tambin permanecer igual la etapa de concurso, donde se valora la trayectoria profesional y los mritos de los candidatos.
Los inspectores educativos consultados consideran positivo que el Profesión de Educacin de Pilar Alegra establezca un primer filtro tipo test porque un cuestionario se corrige con ms objetividad que una prueba de ampliación del temario. Adems, creen que el nuevo maniquí puede ser ms exacto porque en 30-45 preguntas entran todos los temas, mientras que ahora al solicitante le puede caer un tema que no se sepa admisiblemente y se lo juega todo a esa carta.
Sin retención, tambin recuerdan a la maduro facilidad que suele tener el test: No es lo mismo redactar durante dos horas un tema de ampliación, donde los conceptos son ms complejos, que un cuestionario de 30 preguntas, indican las fuentes consultadas.
Adems, echan en errata una prueba, hablado u escrita, que permita exponer con maduro profundidad la parte A del temario, que es comn a todo el Estado, pues con el nuevo verdadero decreto slo se va a desarrollar la parte B, donde las CCAA pueden incluir temas relacionados con su legislacin y organizacin autonmicas.
Los inspectores han ido viendo cmo, con el paso de los lustros, se ha estrecho la exigencia y se ha disminuido el nmero de exmenes en su oposicin hasta arribar a los actuales tres ejercicios. Es una tendencia que se observa en otras pruebas de la funcin pblica que est reformando el Gobierno, las llamadas oposiciones light.
El nuevo verdadero decreto implica ms cambios. Aumenta la profesionalizacin (para poder ser inspector se elevan de seis a ocho los aos de experiencia exigidos como funcionario de carrera en un cuerpo docente y se obliga a que todos los miembros de los rganos de seleccin sean inspectores), se contempla el teletrabajo y se abre la puerta a la promocin profesional, adems de establecer un cdigo deontolgico, entre otras cosas.
Adems, se establece una novedosa cualificacin profesional que las CCAA tendrn que promover mediante planes de formacin donde, conexo a las habilidades de gestin y evaluacin o el conocimiento de la norma, se valorarn las competencias personales: los inspectores debern tener empata en las relaciones sociales y en el trabajo en equipo, as como transmitir a los dems entusiasmo, implicacin y sentido del deber. Pero cmo se mide de forma objetiva el entusiasmo?
En común, los inspectores ven con buenos fanales el goma del verdadero decreto (el susodicho era de 2007), que surge para hacer las adaptaciones de la Lomloe. Pero pelearn para que el Profesión les suba la categora (quieren tener lugar del nivel 26 presente a al menos un nivel 28, como contemplaba un goma susodicho). En el sistema educativo hay cerca de de ocho millones de alumnos, 700.000 profesores y ms de 30.000 centros, pero no llegan a 1.700 los inspectores, que se quejan de que no dan a maleducado para atender debidamente las deposición de los colegios e institutos.