El pleno extraordinario celebrado para aprobar cuatro modificaciones de crédito por valor de 15 millones de euros salió adelante gracias al apoyo del PP al gobierno de Jácome, que ayudó una vez más a su controvertida gestión económica.
Los populares desbloquearon la partida de 5,5 millones para pagar parte de las deudas acumuladas en la cuenta 413 por impagos a proveedores, se abstuvieron para permitir el pago de 7 millones de euros para pagar el dinero de los autobuses encargados y para los que no está previsto pagar la factura, y votaron a favor de la modificación para pagar la deuda del Ayuntamiento Ayuda Deportiva Municipal a los clubes. El reparto fue muy criticado por el BNG y el PSOE, que exigen un cambio de criterio para evitar la discriminación entre clubes. BNG y PSOE sí aprobaron el pago de más de 300.000 euros por cámaras de acceso al Casco Vello y radares.
El punto de mayor conflicto se produjo en el debate sobre los 9 millones de euros de facturas impagadas de la cuenta 413. El interventor, en su informe, expresó su sorpresa por la elevada deuda contraída con Viaqua, 1,75 millones, algo que señaló el portavoz del BNG, Luis Seara. , aludido a.
En aquel momento, el alcalde, Gonzalo Pérez Jácome, lejos de asumir error alguno en la gestión, achacó a la “maquinaria” del Concejo y a “los funcionarios” el retraso en los pagos (120 días de retraso, cuatro veces más de lo permitido). ). por ley). En particular, el concejal arremetió contra el tesorero municipal, a quien, según informó este diario, quiere destituir y cuyo procedimiento de destitución ya ha iniciado. El propio Jácome lo confirmó en el pleno: “La tesorera ralentiza todo, es muy quisquillosa, más que una notaria. No la podemos despedir porque puede, y tiene que quedarse en un puesto similar, pero vamos a proceder a relevarla como tesorera”.
No contento con las críticas al nacionalista Seara, lo llamó a él y a sus asesores “vagos”. acusándolos de no leer el expediente, cuando criticó las advertencias del auditor, que llamó la atención en su informe sobre las elevadas deudas contraídas con Viaqua. Además, en un episodio insólito nunca antes visto en los plenos municipales, el concejal agredió al interventor municipal. “Me da la impresión de que el expediente no fue leído”, dijo sobre el alto funcionario, en grave acusación, insinuando que firma los documentos sin leerlos. Poco después intentó suavizar su opinión, asegurando que el interviniente quizás había cometido un “error garrafal” y una “negligencia”.
En ese momento se produjo un enfrentamiento con la interviniente, quien, como indica el reglamento, pidió la palabra al ser interrogada. Jácome le negó ese derecho y arremetió contra él: “Como suele decir el interventor, la Administración escribe y no habla, así que escribe si quieres”, le espetó.
El concejal de Ourense también negó al BNG el derecho de palabra tras las inhabilitaciones dictadas. En el siguiente turno de palabra, la nacionalista Rhut Reza calificó de “cobardía política” el no responder a la mala gestión de su gobierno local, que según la socialista Natalia González es “un caos”.
Además, en un polémico pleno en el que el PP salvó el mobiliario para poder pagar las facturas y los autobuses ante la falta de presupuestos actualizados, el Ayuntamiento de Ourense no retransmitió en directo online la sesión, como suele hacer cada mes.
Las respuestas de las partes
El PSOE lamentó la “devastación” del PP al alcalde tras aprobar modificaciones presupuestarias “para dar aire” a su “caótica” gestión económica. La modificación aprobada para pagar facturas de la cuenta 413 “es habilitar un crédito sin saber para qué se destinará. No sabemos qué ni por qué se debe ni cómo ni cuándo se pagará”, debido a la “falta de información” de Jácome en los expedientes completos.
El BNG advirtió sobre la gestión “negligente” del gobierno local y del “riesgo” para la estabilidad económica del Concello. Los nacionalistas denunciaron la “falta de información” sobre los impagos y criticaron el reparto de ayudas a los clubes deportivos, proponiendo una alternativa que daría más dinero a las bases. El nacionalista Luis Seara ironizó que el PP tiene en el pleno “la mayor representación de la historia, con 17 concejales”.
La popular Ana Méndez criticó la “falta total de gestión administrativa” de Jácome, que le obliga a pedir ayuda a la oposición, pese a la “administración paralela” montada en el Consejo a base de asesores: “Que se pongan a trabajar”. Méndez irónicamente dijo que Jácome es un “excelente presidente del comité de fiestas pero un pésimo gestor”.