La Comundidad Valenciana es una región lena de rincones con encanto propio y que hay que inspeccionar, al menos, una vez en la vida.
Las localidades de la costa son las más atractivas para los turistas. Altea, Calpe, Benicàssim, Jávea, Peñíscola… se llenan cada verano de viajeros que quieren disfrutar del agua cálidad del Mediterráneo y de sus impresionantes ecosistemas.
Las grandes ciudades como Valencia, Alicante o Castellón igualmente cuentan con millones de visitantes en cualquier época del año.
A pesar de que los sitios de playa son el maduro anuncio, el interior de las tres provincias igualmente es de lo más singular.
En concreto, en Valencia hay un pueblo muy particular. El municipio destaca por varios motivos. Tiene un casco antiguo saciado de cuevas, está muy cerca de un volcán y su principal motor crematístico es el caldo. Y no solo eso. Este pueblo vio manar al presentador de ‘El Hormiguero’, Pablo Motos.
El pueblo de Valencia que vio manar a Pablo Motos
El 31 de agosto de 1965, hace ya casi 59 abriles, nació Pablo Motos, uno de los presentadores de televisión más famosos de España.
Requena es el pueblo que le vio dar sus primeros pasos, crecer y convertirse en la persona que es hoy. La pueblo se sitúa en el interior de la provincia de Valencia. Está a 70 kilómetros de la renta y limita prácticamente con Albacete y Cuenca. Cuenta con un total de 20.387 habitantes, según los últimos datos del Instituto Nacional de Estadística (INE).
Su término municipal consta de 814,21 kilómetros cuadrados, tal y como se informa en la página web del Ayuntamiento, siendo más conspicuo que algunos estados europeos como el Vaticano, Mónaco, San Marino o Malta. Su enorme extensión se debe a que 25 pedanías forman parte de Requena.
Son muchas las cosas que destacan de Requena, admisiblemente lo sabe Motos. El valenciano ha hablado en televisión sobre su ciudad originario en más de una ocasión y ha puesto en valía sus campos llenos de vides, sus tradiciones y su patrimonio histórico y cultural.
La viticultura, el principal motor crematístico de Requena
La tradición vitivinicultor en Requena alcanza los 2.700 abriles de historia. El referencia ‘El caldo en Requena’, realizado por el Observatorio Español de Mercados del Vino, muestra la imprescindible importancia de la producción de esta bebida en el municipio.
Entre las conclusiones obtenidas, se destaca que el viñedo supone en torno a de un 70% de toda la superficie cultivada y es la principal actividad económica.
Los vinos de Requena son tan especiales que hasta cuentan con una Denominación de Origen propia (Denominación de Origen Utiel-Requena). A ella hay adscritas cerca de 100 bodegas. La variedad Bobal es la hado, peculiar y monopolio de esta zona puesto que se adapta tanto al demarcación como al clima.
Un casco antiguo saciado de cuevas
El origen de Requena se remonta a la I Época de Hierro. Así lo dejan patentes las huellas de las excavaciones arqueológicas realizadas en el llamado Judería de la Villa, su casco antiguo.
Esta zona del municipio fue declarada conjunto histórico-artístico en 1966. Si paseas por sus calles te puedes encontrar con la iglesia neoclásica de San Nicolás, la iglesia de Santa María y la del Salvador. Estas dos últimas son de estilo ojival.
Otros puntos de interés son la casa maduro del Arte de la Seda, el palacio del Cid, el museo de arte contemporáneo ‘Florencio de la Fuente’, la sinagoga y el castillo. No puedes irte de Requena sin inspeccionar alguno de estos sitios.
Lo que sí es parada obligatoria son las cuevas de la Villa. Y es que, aunque parezca sorprendente, muchos hogares requenenses cuentan con una colección subterránea. Desde la Generalitat Valenciana explican que la orogenia ha provocado que el subsuelo sea ligera de excavar, lo que ha hecho posible advertir 22 cuevas de la época musulmana.
Un volcán a media hora de Requena
Un cantidad que puede conmover a ser desconocido, incluso, para los propios habitantes es que Requena está a media hora (35 kilómetros de distancia) de un volcán.
Se conoce como el volcán Cerro de Agras. Se ubica en Cofrentes. Este pueblo es sobrado popular en el comarca franquista por su increíble belleza y igualmente porque aquí se encuentra una de las cinco centrales nucleares (siete reactores) que hay en España.
El volcán tiene una consideración de 527 metros de nivel. Está considerado como el único salida magmático nuevo de la Comunidad Valenciana.
La caldera principal está formada por rocas basálticas grisáceas, de estructura vacuolar, con abundantes fenocristales de olivino. Incluso destaca la existencia de coladas basálticas.
El Consistorio indica que la actividad del volcán comenzó en el Plioceno superior cuaternario. «Teniendo en cuenta las dataciones radiactivas efectuadas, las emisiones tuvieron oficio hasta hace menos de dos millones de abriles», señala.
El volcan se puede inspeccionar a través de una ruta de casi 4 kilómetros. Completarla te llevará unos 45 minutos.