Nuevo movimiento en el caso del centro de menores no acompañados (menas) que el Gobierno de Isabel Díaz Ayuso ha proyectado en el sur de la región. El Comunidad de Fuenlabrada, liderado por el corregidor socialista Francisco Javier Ayala Ortega, ha precintado las obras en el espacio medioambiental de La Cantueña, en el que la Comunidad de Madrid pretende fundar un macrocentro para menas.
El precinto se produce en cumplimiento del decreto de paralización de las obras emitido la pasada semana por el comunidad «por considerar que, al existir un expediente de reversión del espacio y, por lo tanto, dudas sobre la titularidad del mismo, no deben comenzar los trabajos», han señalado desde la corporación fuenlabreña.
El comunidad asegura que no ha recibido notificación alguna del auditoría suspendiendo de forma cautelar el precinto por lo que continúa delante con lo establecido en el decreto de paralización de obras. Adicionalmente, consideran que la Comunidad de Madrid incumple el convenio de cesión del espacio de La Cantueña y, por lo tanto, la ciudad está en su derecho de recuperarlo.
El consistorio argumenta que «está en contra del maniquí de macrocentro seleccionado por la Comunidad que incumple las recomendaciones del Consejo de Europa y la propia ley regional de servicios sociales».
No obstante, la reacción del Gobierno autonómico de Ayuso no se ha hecho esperar. El portavoz del Ejecutor madrileño, Miguel Aquel García, considera que ese precinto supone «que el corregidor de Fuenlabrada se ha obvio en rebeldía».