En principio, la reunión de la Mesa está prevista para el viernes 14 de junio, y será la misma convocatoria en la que incluso podría estar la primera parte del expediente sancionador contra el diputado de Más Madrid Pablo Padilla, por afectar un disparo en el Pleno mientras hablaba Ayuso.
La mayoría absoluta del PP no deja extensión a las dudas sobre la osadía que tomará la Mesa de la Cámara al analizar la solicitud de la comisión. El primer trámite quedará así solventado, aunque los trabajos de la comisión de investigación no empezarán hasta el mes de octubre, y sus reuniones se prolongarán hasta el mes de febrero de 2025.
De momento, el anuncio de la comisión ya ha supuesto una convulsión política en el Parlamento regional, ya que coincide, encima, con la recta final de la campaña de las europeas. El PP de Ayuso ya ha conseguido el primer impacto político, solo con el hecho de registrar la solicitud. En julio y agosto llegará el parón veraniego, al ser meses inhábiles, y el otoño se presentará caliente para la Asamblea.
Los dos grupos de la izquierda cargaron ayer contra Ayuso por esta iniciativa política para investigar a la mujer del presidente. La envite es arriesgada, porque Begoña Gómez está convocatoria a determinar delante el árbitro el 5 de julio, y hasta octubre quedarían aún tres meses más y es difícil conocer cómo va a ponerse al día este caso.
Lo que parece evidente es que este paso del PP de Madrid empozoña aún más su relación con la izquierda, y en concreto con el PSOE de Juan Lobato, posteriormente de unos primeros meses de sesión en los que parecía que los acuerdos eran posibles. De hecho, se logró alguno sonado, como el de la Agencia de Ciberseguridad y el preacuerdo para la reforma del Estatuto de Autonomía, que luego quedó en ausencia.