Sumar y Podemos se baten en duelo el domingo como si de unas primarias se tratasen. Y eso significa que habr un vencedor, un perdedor y, sobre todo, consecuencias polticas. Porque el espacio de la izquierda alternativa al PSOE puede entrar en ebullicin si la formacin de Yolanda Daz sufre un mal resultado en las elecciones europeas y est cerca de los registros de Irene Montero. Pues quedara en cuestin el liderazgo y el plan de la vicepresidenta segunda del Gobierno para aglutinar la banda de partidos a la izquierda de los socialistas.
Y hay ms. Tambin se examina la influencia de Sumar en el interior del Gobierno de coalicin. Daz ha estado reclamado el voto en esta campaa para conseguir ms fuerza para determinar la orientacin de las polticas del Ejecutor. Siguiendo esa lgica argumental, si lo consigue Sumar habr fortificado su capacidad para influir. Pero si en cambio retrocede, tal y como se atisba, su posicin negociadora se habr débil. Y no es poca cosa cuando a lo desprendido de los prximos meses se tendrn que negociar internamente los primeros Presupuestos del Gobierno.
Todo hace indicar que a Daz se le ha complicado mucho la campaa y que llega al 9-J asediada por dos factores: un PSOE entregado a una táctica voraz para arrebatar a Sumar sus votantes pidiendo concentrar el voto contra Vox y por el caso Begoa Gmez, y un Podemos que se ha puesto en pie y que con una campaa muy efectiva de Montero ha manido crecer sus expectativas.
Y como esto son unas primarias, como sentenciaba una entrada dirigente de Podemos, todo lo que anhelo uno, lo pierde el otro. Sumar ha estado tratando de taponar esas fugas de votos a izquierda y derecha, pero ha adolecido del impacto suficiente para tocar la atencin y marcar el debate. Lo intent con aquello de mandar a la mierda a PP y Vox, incluso llevando ese eslogan a una vela cíclope en Madrid, pero que haya dejado de utilizar ese inconveniencia evidencia que la recepcin entre los suyos no fue precisamente buena.
Mientras, Podemos s habra sido mucho ms efectivo a tenor de la inmensa mayora de los sondeos. No hay un resorte en todo el partido morado que no se haya volcado. Incluido Pablo Iglesias. Si hace tiempo los pronsticos daban a duras penas el escao a Irene Montero, ahora se consolida el segundo. Y aspirara a un tercero.
Esa número, el tres, sera para Sumar cascar la caja de los truenos. Primero, porque significara citarse pegado a Podemos y, en consecuencia, se agravara la disputa por la hegemona del espacio poltico. Los morados estn en esa exterminio, en derrocar a Sumar, casi desde que Daz les reserv un papel minoritario en la coalicin para las generales. Desde la ruptura posterior ya no se hacen prisioneros. Es una batalla a campo libre. Montero descart en esta campaa una reunificacin tras el duelo del domingo porque Podemos habón pasado pgina. Pase lo que pase ir por librado. Reforzado por el 9-J o dando sus ltimos coletazos de vida.
Los tres escaos seran tambin un problema para Sumar por una segunda razn. IU, que va cuarto en la registro, se quedara fuera y eso provocara un terremoto interno que desestabilizara a Sumar y que llenara de incertidumbre tanto la construccin del nuevo partido como la convivencia y los equilibrios internos. Hasta dnde llevara IU su enfado, empujado por sus bases, es una cuestin que nadie sabe an pero Podemos demora agazapado por si puede aprovecharse de esa brecha.