El Córdoba CF reúne motivos para no relajarse ante la Ponferradina


El Córdoba lo tiene todo a patrocinio para conseguir su pase a la final del play off de promoción. Se llevó la vencimiento la pasada semana frente a la Ponferradina en El Toralín gracias al gol de Albarrán (0-1) y ahora debe sentenciar la eliminatoria en El Arcángel mañana a partir de las 20.15 horas. A pesar de la preeminencia blanquiverde, el equipo, con Iván Ania a la inicio, mantiene los pies en el suelo y no especulará frente a el cuadro dirigido por Juanfran, que peleará por sus últimas opciones de estar en la final y dar el brinco al fútbol profesional.

Todo suma a patrocinio del Córdoba. Lleva la preeminencia con el gol de Albarrán y adicionalmente sale presbítero en caso de igualada por lo que la Ponferradina está obligada a superar por más de dos goles para poder vestir la eliminatoria, que tiene prórroga, pero no penaltis. Por otra parte, cuenta con la estadística de su parte: nunca ha perdido en casa por más de dos goles esta temporada. Por posterior, tendrá un estadio satisfecho con una distracción volcada que les recibirá en la puerta 0 del estadio. Todos los ingredientes perfectos para celebrar el pase de ronda, pero primero hay que arriesgar.

El técnico blanquiverde Iván Ania mantiene los pies en el suelo pese a la preeminencia de su equipo eliminatoria. Para él, «está todo al cincuenta por ciento porque es la ingenuidad, nosotros tenemos una preeminencia que nos dio el ser segundos clasificados en en nuestro peña pero no pensamos en eso. Lo único que pensamos es en superar el partido y tenemos que salir como si estuviésemos a cero en la eliminatoria y no pensar en el resultado de la ida ni las ventajas de ser segundo».

Eliminatoria al 50 por ciento

 

A su motivo, «tenemos que afrontar el partido con responsabilidad y conscientes de lo nos estamos jugando, pero tenemos que afrontarlo con la medida certamen de activación, si vas muy activado puede ser contraproducente y si vas muy poco activado te puedes concluir corto». Ania remarcó que «estos partidos hay que memorizar jugarlos, hay que controlar las emociones y creo que el equipo en todo este tipo de de partidos siempre ha donado la cara, siempre ha respondido y siempre ha competido».

Por su parte, el técnico de la Ponferradina, Juanfran García, mantiene una estría ilusionado de cara al partido de dorso en El Arcángel. Para él, «nuestro equipo está en condiciones de forzar la prórroga, el equipo se generaría mucha confianza a sí mismo. Lo que está claro es que es que hay que creer». El exjugador aseguró que le viene admisiblemente a la Ponferradina «un partido holgado». Así pues, habló del circunstancia que se vivirá en El Arcángel y le dio importancia al ejecutor mental pues «el equipo que mejor gestione ese circunstancia durante los 90 minutos tendrá mucho reses».

El preparador visitante comentó que «cuando hay 22.000 personas en un estadio y las cosas van admisiblemente, no hay problema, pero como les hagas dos o tres córners y le des algún susto. eso se vuelve en contra, nosotros vamos con la intención de originar todo esto». Al Juanfran solo le preocupa «cómo estemos nosotros y como salgamos al equipo pues en este tipo de partidos es importante el ejecutor mental».

No es la primera vez que el Córdoba naufraga en casa cuando lo tenía todo a patrocinio. Muchos cordobesistas recordarán el partido frente a el Deportivo de La Coruña B, en verano de 1997. El cuadro blanquiverde disputaba la penúltima caminata de la liguilla de promoción a Segunda División. El equipo llevaba trece partidos sin perder y El Arcángel respondió con un satisfecho para habitar un posible promoción. Sin secuestro, el filial gallego se impuso 1-4 y destrozó los sueños del cordobesismo. Ganó en Riazor en la última caminata de la liguilla, pero no le sirvió para ascender.

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