Conexión de unión
Dos mociones presentadas por las tres formaciones de la examen, una de PSOE y PP en popular, instaban a que una vez realizadas las obras, se mantenga el CIMM en su coetáneo ubicación. Sin confiscación, la concejala del gobierno de Democracia Ourensana Tamara Silva se negó a confirmar que se vaya a prolongar ese espacio como sede del CIMM, mantiene el traslado temporal a la Praza de San Martiño y avanzó que se hará “un estudo de viabilidade para ver se é posible” la envés a O Couto.
“É un espazo fundamental para as mulleres. É un espazo de loita xeral contra a violencia machista”, afirmó la nacionalista Erea Blanco, que tildó de “escusa” la presencia de radón en el CIMM para desmantelarlo. “Desde que gobernan non houbo intención de resolver esta cuestión”, apuntó.
“DO podería ser tamén a denominación de orixe dun goberno de profesionais do acoso, do desmantelamento, dos cortaduras e das mentiras. Agora o pequeno dictador é acosador. Non debería estar nesa cadeira”, afirmó la socialista Natalia González, quien se refirió directamente al nacionalista a Luis Seara para pedir que entre los dos convenzan al PP de echar a Jácome: “Estamos na temporada de acordos e consensos por Ourense e de non marear a perdiz. Aquí non hai dous sen tres e hai que convencer ao PP. O que non teño dúbida é que o BNG ten compromiso para facelo”, indicó la socialista, antiguamente de retornar a balbucir sobre la situación del CIMM. “Vostede quere aproveitar a escusa do gas radón para pechar un extensión secreto para as mulleres. Tenlle inquina ás mulleres”, espetó la socialista al regidor.
Tras las duras palabras de Natalia González, Jácome reaccionó llamando “vulgar ladrona y choriza” a la socialista, mientras la popular Noelia Pérez pedía “respeto” para los miembros de la corporación. La popular lo pidió antiguamente de defender con uñas y dientes el CIMM. “Las usuarias merecen una atención digna y unas instalaciones que den cobertura a sus deposición y que pueda mantenerse su confidencialidad porque en muchos casos estamos hablando de víctimas de violencia de clase”, defendió Pérez. “En el CIMM llevaban 15 días con todo guardado en cajas y sin inocencia. O las mata el radón o las matan las ratas”, criticaba la popular.
Por parte del gobierno almacén, Tamara Silva se limitó a asegurar que “en ningún momento se dixo que se ía pechar o CIMM, o que se vai facer é trasladalo, non é seguro para as traballadoras”, añadió. Acusó a la examen de crear “temor social” pero, eso sí, se negó a confirmar si volverá a su ubicación y si costearán las obras para eliminar el radón.
Con los votos del PP y del PSOE se aprobó la moción del BNG, con una remedio que retiraba la petición de instar a la Xunta a que intervenga, mientras que por unanimidad de los tres grupos de la examen dio luz verde a la moción conjunta de populares y socialistas.
Reproches
Fue este un punto de unión que no existe para articular una moción de censura. Todos coinciden en lo nocivo que Jácome es para la ciudad, pero PP y BNG se empeñaron en tirarse los trastos a la capital. Los populares señalaron a los nacionalistas como “únicos responsables” de que Jácome siga al mando por no sentarse con ellos a balbucir, mientras Luis Seara lamentó la “campaña de intoxicación” contra ellos, mientras recordó cuando en el antecedente mandato el Partido Popular dejó la arnés vacía en una reunión en el Colegio para despabilarse un gobierno posible. La popular Noelia Pérez respondió acusando al BNG de “estar máis cómodo sendo examen”.