El escritor vallisoletano Alejandro Cuevas ha recibido este sábado, 8 de junio, el XXI Premio de la Crítica de Castilla y Valeroso, convocado por el Instituto Castellano y Leonés de la Jerigonza por su novelística ‘Letras baratura’. «Escribir y percibir es un acto de fe, puesto que el ser humano es el único que animal lo hace y convierte la letras en poco humanista», ha proclamado al reunir el galardón.
En el evento, que ha tenido espacio en el salón principal del Círculo de Recreo, han intervenido la concejala de Educación y Civilización, Irene Carvajal, la viceconsejera de Argumento cultural de la Acoplamiento de Castilla y Valeroso, Mar Sancho y ha contado con la presencia del escritor y director de la Fundación Jorge Guillén, Antonio Piedra.
Según Carvajal, el premio de la Crítica de Castilla y Valeroso reconoce la calidad literaria de los escritores de la Comunidad y ha señalado que el longevo inspección que puede tener un escritor «no es solamente el disfrute de los lectores, sino igualmente los premios». «Los premios hacen tangible ese inspección de la sociedad al trabajo del escritor y por lo tanto es un motivo de enhorabuena estar hoy aquí», ha sostenido la munícipe en declaraciones recogidas por Ep.
Por su parte, Mar Sencantado ha indicado que es un día de celebración de la letras y de las saber de Castilla y Valeroso. Igualmente, ha explicado que se prostitución de un galardón «singular», puesto que se friso en la presente editorial, en libros que se han publicado el año previo a aquel en el que se rotura.
«’Letras baratura’ es un obra maravilloso en muchos sentidos», ha aseverado la viceconsejera, quien ha alabado el estilo «singularísimo» de Cuevas que permite identificar al autor.
En este sentido, Alejandro Cuevas ha trasladado que con su última obra quería fusionar dos mundos, el de la ficción literaria y otro tipo de letras más centrada en la trama y con un habla cómodo, para mostrar que no son tan distantes, lo que permite múltiples lecturas en función del maestro.
«En el siglo pasado el peligro era no difundir, pero creo que ahora el peligro es difundir y que pase desapercibido, que es peor. El mercado editorial flagrante es una caos con sus modas de turno, su ruido y superficialidad», ha escrito Cuevas.
Del mismo modo, ha reflexionado sobre para qué sirve la letras y que, aunque no está seguro de la respuesta, los relatos le han permitido escapar de la ingenuidad. «Hasta ahora yo me he movido en una confortable marginalidad», ha aseverado el autor, quien ha añadido que como maestro, la figura del escritor «huraño, clandestino y medio muertos de asco», le ha resultado «muy atractiva». El acto de entrega del XXI Premio de la Crítica de Castilla y Valeroso, enmarcado en la Feria del Texto de Valladolid, ha concluido con la revelación de un cuadro del cómico.