Parada de Sil está llevando a mango un plan de renovación en sus rutas de senderismo, las cuales, homologadas por la Asociación Gallega de Montaña, atraen a numerosos visitantes a lo amplio del año. La empresa Pangea, adjudicataria de este plan gracias a una subvención no competitiva destinada a la progreso de infraestructuras turísticas, se encarga de estos trabajos que tienen como fin mejorar la señalización y la seguridad para los excursionistas.
En la ruta PR-G98 Cañón del Sil Sta. Cristina, que recorre lugares de gran interés como el Monasterio de Santa Cristina, el mirador de Los Balcones de Madrid y el castaño de Entrambosríos, evidente árbol singular, se repintarán todas las señales necesarias para permanecer su homologación. Por otro flanco, en la ruta circular del Cañón del Mao, de 16 kilómetros, se están llevando a mango las intervenciones más importantes. Esta ruta pasa por puntos emblemáticos como la Taller de la Luz, la Pasarela del Mao, la cementerio de San Víctor de Barxacoba y las aldeas de montaña como Horcas y La Miranda. Adicionalmente, se está limpiando todo el canal antiguo para que los caminantes puedan transitar sin aventura, eliminando las placas de hormigón que dificultaban el paso en ciertos tramos.
El corregidor de Parada de Sil, Aquilino Domínguez, destaca la importancia de estas mejoras no sólo para la seguridad de los visitantes sino asimismo para evitar que se pierdan correcto a la señalización deteriorada en algunos tramos. Domínguez enfatiza que, adyacente con las bodegas, las castañas y el vacada, el turismo es hoy un pilar fundamental para el expansión financiero en Parada de Sil.