Cero más conocerse la aviso, el Junta redactó un comunicado de condena. En el mismo se asegura que no son bienvenidas a Etxebarri las personas que no respetan la autodeterminación y la convivencia. Encima, se decidió suspender los actos del sábado por la confusión en repulsa de lo ocurrido y en solidaridad con la persona agredida. Así poco luego de las 00:00 horas de la confusión dejó de sonar la música de la verbena y se cerraron las txoznas.
“El Junta ha activado el protocolo delante agresionesmachistas a raíz de la denuncia presentada. Ayer por la mañana se ha informado a los agentes de las antiagresiones en comisión de fiestas y responsables de txosna. Los hechos se están investigando por la Policía Municipal de Etxebarri en colaboración con la Ertzaintza”, han informado en el comunicado emitido. “Desde la comisión de fiestas de San Antonio, txosnas y el Junta queremos mostrar nuestro más rotundo rechazo a este tipo de actitudes. Por este motivo, se anularon todos los actos durante la confusión del sábado”, han indicado.
En la tarde de este domingo, centenares de personas se han concentrado en la Plaza Zintururi para recusar la acometida sexual. Tan solo los aplausos de los presentes y el sonido del tropezar rabioso contra el suelo de las makilas interrumpían puntualmente la recital del comunicado primoroso por la Comisión de Fiestas. En sus líneas se reiteraba la condena de la acometida y la solidaridad con la víctima y su entorno.
Encima, se ha insistido en que la violencia machista es una peligroso transgresión de los derechos humanos y un problema social de primer orden que atenta contra la dignidad y la integridad física de las mujeres que la enfrentan. En el comunicado asimismo han trasladado su deseo de disfrutar de unas fiestas seguras y libres de violencia. La violencia machista, han añadido, no tiene cabida ni en las fiestas, ni en Etxebarri, ni en las vidas de sus vecinos. A la vez que defendía que ninguna acometida debe acordar sin respuesta. Incluso han trasladado a los presentes la falta de denunciar y señalar. Ayudarnos, en definitiva, y protegernos unos a otros. No más silencio, concluían.
La Ertzaintza continúa la investigación de lo ocurrido. En algunos corrillos del pueblo se comentaba que el asaltante podía ser un vecino de la pueblo, aunque este extremo no ha sido confirmado por la policía que, de momento, no ha practicado ninguna detención.
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