La concurrencia en las urnas es último que en 2019 pero esa cita coincidió con elecciones autonómicas y municipales
La décimo en las elecciones europeas de ayer fue de casi la centro del censo electoral (49,20%). Una tendencia a la pérdida si se compara con los anteriores comicios celebrados en mayo de 2019, en los que fue quince puntos superior (64,29%), pero la comparación no es válida como quiera que en aquellas cita los españoles además fueron a elegir en las autonómicas y municipales, lo que explica esa décimo tan elevada para unos comicios europeos en España.
Teniendo en cuenta esta variable, la décimo de ayer fue conveniente elevada para unas elecciones sólo europeas. Tanto que sólo hubo una convocatoria preparatorio con más seguimiento y fue hace tres décadas, en 1994, la tercera vez que los españoles votaban al Parlamento Europeo y lo hicieron seis de cada diez (59,14%). Pero en las últimas citas nunca se han acercado al 50%, como ocurrió ayer, cuando sólo estaban llamados a nominar eurodiputados. El precedente más cercano y comparable es el de hace diez primaveras, cuando la décimo se quedó en el 43,81 %. Ya entonces esa emblema cayó en más de un punto con respecto a la convocatoria preparatorio (2009), en la que llegó al 44,90%. Y la tendencia a la pérdida venía de antiguamente, como quiera que en 2004 fueron a elegir el 45,14%.
Es sostener, los españoles acudieron ayer a las urnas europeas más que en todas las elecciones comunitarias de este siglo, excepto en las de 2019, cuando lo hicieron por el publicidad de nominar a su corregidor y presidente autonómico, adicionalmente de a los eurodiputados.