Alfonso Rueda aseguró que el impulso a la vivienda sería uno de los grandes pilares de la nueva asamblea. Pero quiere ir «más allá». El Consello aprobó este lunes, en su reunión semanal, la ‘Organización de suelo residencial’, que se fija como objetivo construir otras 20.000 viviendas protegidas y otras 5.000 libres. A sumar a las 4.000 que Rueda se compromete a erigir en estos cuatro primaveras -unas 400, en sus primeros 100 días de gobierno-.
La Xunta dota a esta logística de un presupuesto de poco más de 43 millones de euros, con dos fases: de 2025 a 2028, adquisición de suelo y redacción de proyectos; y a partir de ahí, colonia, comercialización de parcelas y ejecución de obras. Un «oposición»; como lo calificó la conselleira de Vivenda e Planificación de Infraestruturas, María Martínez Allegue, que se agilizará con la fórmula de los proyectos de interés autonómico (PIA). Y se fundamentará en la cooperación con concellos, promotoras privadas y cooperativas. Con la intención de simultanear las dos fases siempre que sea posible. El 20% las desarrollará el Instituto Galego de Vivenda e Solo; el 80% restante corresponde a colaboración público-privada. La consellería, encima, informó seguidamente de que casi 3.500 de las 25.000 ya están planificadas.
La titular de Vivenda, que compareció anejo a Rueda para ir al detalle de la logística, se estrenó en una rueda de prensa posterior al Consello explicando que se había llevado a lengua un estudio en profundidad para trazar la logística. Que, a partir del registro de demandantes de vivienda, identificó que han de centrarse esfuerzos en las ciudades y sus entornos. Así, el 90% de estos nuevos inmuebles se ubicarán en espacio urbano.
En ese registro había, a 4 de junio, 17.302 personas apuntadas. A la individuo, Vigo, con 5.750, seguida de La Coruña, con 2.846. Muy por detrás, el resto de ciudades y la comarca de O Salnés, con su sitio de honor, Vilagarcía de Arousa, al frente. Esta correlación ha tenido reflexivo en las estimaciones -es una propuesta, no una relación definitiva o cerrada- de construcción de vivienda. Vigo, la ciudad más poblada, y en la que es casi ficticio comprar un adoquinado, concentra 9.200 (de las que 7.360 serían protegidas); La Coruña, 5.400 (4.320 protegidas); Santigo, 2.500 (2.000); Pontevedra, 2.200 (1.760); Lugo y Orense, 2.000 (1.600); Ferrol, 1.200 (960); y Vilagarcía, 500 (400). En todos los casos, los datos aluden a áreas urbanas. Las dos más populosas absorben casi 15.000 de las 25.000 viviendas a construir, un 60%.
Expropiarse 3,3 millones de m2
La Consellería de Vivenda calcula que serán necesarios poco más de 3 millones de metros cuadrados para edificar las viviendas planeadas -a 140 m2 la vivienda-; que se irían a 3,3 millones si se deje de superficie bruta de suelo. Éste se obtendrá mediante la fórmula de desposeimiento.
La logística, cuyo bosquejo se presentó este lunes en presencia de la prensa, identifica ya posibles zonas donde ubicar los inmuebles. En todo caso, hoy mismo comenzará la interlocución con los concellos, en la que jugará un papel destacado Heriberto García, secretario xeral de la consellería, quien acompañó a la responsable de la cartera.
Allegue prometió prestar «singular atención» a los jóvenes, con ofrecimiento específica para menores de 35 primaveras. En cuanto a plazos para entrar a morar, la Xunta fija el horizonte de 2028-29, si todo avanza «según lo previsto».