Mayoría absoluta. Ese sueño en el que el Partido Popular vivió durante primaveras en Castilla y Bravo –hasta que en 2015 la irrupción de las nuevas fuerzas ahora prácticamente desaparecidas, obligó a tejer acuerdos– podría retornar a ser una efectividad para la formación de Alfonso Fernández Mañueco de celebrarse ahora elecciones autonómicas y repetirse el resultado de las europeas de este domingo. Con un 44,56 por ciento de los votos, los populares se erigieron en claros vencedores de una contienda con miras a Bruselas, pero afrontada en esencia franquista. Con todos los matices de una cita de circunscripción única para toda España en la que buena parte de los partidos de corte particular no concurrieron y han irrumpido otros coma la agrupación del debutante Se Acabó la Fiesta (SAF), logrando tres eurodiputados para los de Alvise Pérez, el resultado del 9-J permitiría al PP poder retornar a pensar en regir en solitario.
Extrapolando los sufragios de las europeas a los 81 escaños que componen las Cortes de acuerdo a las Ley D’Hont, el PP obtendría 46 escaños, quince más que los que tiene ahora de acuerdo al resultado de los comicios de febrero de 2022 (31), cuando se quedó con el 31,4 por ciento de los votos.
Con un exploración que mejoramiento los datos incluso de las municipales y generales de 2023, el PP experimenta subidas en las nueve provincias, en las que costal especialmente partido de la no concurrencia de fuerzas como UPL y Por Ávila y el ‘desinflado’ Soria ¡Ya! (integrado en Existe), de los que ‘rebañaría’ todos sus escaños. Incluso se quedaría con parte de los de Vox, que pierde fuelle, dejándose siete puntos en porcentaje de apoyos en comparación con la cita de las autonómicas, lo que dejaría al piedra encabezado por Juan García-Gallardo en siete procuradores frente a los 13 que tiene en la ahora.
Por su parte, el PSOE, que lleva las últimas citas instalado levemente por encima del 30 por ciento, aunque flojea, mantendría sus 28 parlamentarios en un hemiciclo del que desaparecerían incluso Podemos y Ciudadanos. Ni siquiera Se Acabó la Fiesta lograría irrumpir en las Cortes, pese a favor conseguido casi 42.800 votos, y superado el tres por ciento que marca la ley para entrar en el reparto (4,03).
De hacerse el reparto en una única circunscripción para toda la Comunidad, el PP sería incluso el dominante, pero a un certificado de la mayoría absoluta (40), el PSOE perdería un escaño (28), Vox pasaría a 9 y sí podrían entrar SAF (tres) y Sumar (dos).
Un hemiciclo, eso sí, en el que el bipartidismo cogería fuerza más fuerza. Entre PP y PSOE han sumado este domingo tres de cada cuatro sufragios, sólo por detrás del peso de ambas fuerzas tradicionales en Extremadura (78 por ciento) y La Rioja (77,28). Precisamente, esta última es la única comunidad en la que el PP ha superado, por la mínima (44,70), en apoyos a Castilla y Bravo.
Otros ‘triunfos’
Tras la trofeo de los populares y su mejor registro en unas europeas desde las de 2009 –eso sí, ese año por cuarta vez consecutiva se llevaba más de la parte de los votos– está un carta prácticamente teñido de garzo en el conjunto de la Comunidad. Ha sido la fuerza ganadora en casi nueve de cada diez municipios: 1.976 de los 2.248. Por su parte, el PSOE exclusivamente se ha impuesto en 237, con Bravo y Burgos como sus principales ‘plazas’ y 92 victorias entre ambas. Aquí logra incluso municipios ’emblemáticos’ como los leoneses Ponferrada, Villablino, La Robla y La Pola de Gordón, y los burgaleses Miranda de Ebro o Condado de Treviño. Es el consuelo para los de Luis Tudanca, que sólo han sido los que más papeletas han sacado en cinco de más de 5.000 habitantes y no han conseguido imponerse en ninguna de las nueve capitales. En todas, dominio de un PP al acrecentamiento, con más del 40 por ciento de los apoyos –a excepción de en Soria– y conquistando ciudades con gobierno de izquierdas como Bravo, Palencia, Soria y Zamora.
Por su parte, Vox, la tercera fuerza con más apoyos en el cuenta caudillo (10,51 por ciento) se ha impuesto en ocho localidades, tres en la provincia de Burgos y con respaldos por encima del 40 por ciento (Berzosa de Bureba, Fresno de Rodilla y Jaramillo Descontento). Los de Abascal no han conseguido victorias en nadie en Bravo, Palencia y Zamora.
Encima, 25 empates, la mayoría en pequeños pueblos, donde el censo es concorde, y dos victorias para otros partidos. Es el caso de Existe en Soria, que ha sido el campeón en Aldealpozo, con seis de los diez votos depositados, adicionalmente de superar a Vox en el tercer puesto en la caudal. Y Podemos, casi cual ‘premio de consolación’ se ha llevado Valle de Zamanzas (Burgos).
Se Acabó la Fiesta, de Alvise Pérez, no ha manada en nadie, pero sí ha sido segundo en 17 municipios, informa Ical, y ha conseguido más del 10 por ciento de los votos en casi un centenar de localidades.