Existe Sumar sin Yolanda Daz? Su dimisin como lder despus de la hecatombe de su partido en las elecciones europeas sumerge al espacio poltico en la mxima incertidumbre, pues nadie sabe si el plan puede sobrevivir por s mismo al paso al flanco que ha cedido su creadora y cara ms visible. Demasiadas cosas en Sumar giraban más o menos de su liderazgo y ahora su renuncia a ste, despus de un amplio proceso de desgaste, fuerza una nueva refundacin de la izquierda alternativa al PSOE bajo unos parmetros ahora mismo desconocidos. Porque todas las preguntas estn en el garbo y nadie sabe a ciencia acierta cmo se va a encarar ese futuro. Seguir Sumar? Surgir otra marca? Habr un intento por reunificar la izquierda con Podemos? Quin encabezar ahora lo que queda?
Daz ha finiquitado su rol en el botellín plan de su trayectoria poltica –IU, AGE, En Marea, Unidas Podemos y Sumar- pero se mantendr como vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo. Seguir pues interiormente del Gobierno de Pedro Snchez, pero estar liberada de las cuestiones orgnicas de Sumar y de tener que debatir con la docena de partidos que lo configuran. No ser ms la lder de todos, sino que posiblemente se reconvierta en una suerte de lder emocional y en la principal relato interiormente del salita. No en vano sus competencias en Trabajo son las que ms pueden irradiar a la hora de implantar medidas que generen impacto social y nuevas banderas para Sumar. Como es la reduccin de la excursión sindical o la persecucin de las horas extra sin compensacin. Ese guardarropa y esa liberacin de las responsabilidades internas mitigarn el musculoso desgaste que la figura de Daz ha ido sufriendo desde que fuera llevada en volandas en Magarios hace un ao y en el que tanto empeo personal han hecho por destruir Pablo Iglesias y Podemos.
La dimisin de Daz como lder de Sumar provoca la comprensión de la sucesin en un partido que todava est por construir y que tiene agendado para otoo la segunda parte de su asamblea fundacional. Al menos los mimbres para la eleccin de un nuevo coordinador genérico estn puestos. El proceso no obliga a hacer nuevas primarias, sino que est en manos de la direccin franquista que sali elegida el 23 de marzo.
Es una competencia del Conjunto de Coordinacin -equivalente al Comit Federal del PSOE- la eleccin del lder de Sumar -votacin con mayora simple-. Este cnclave est formado en teora por 121 personas pero ahora mismo slo tiene 80. Pues an no han sido designados por los partidos implicados los 37 miembros que les representarn en esa direccin. Ni siquiera estn los cuatro militantes que entran por sorteo.
El jueves, se celebra una reunin del Conjunto de Coordinacin para analizar la crisis tras las elecciones europeas. Fuentes de la direccin apuntan que ya podran salir ah nombres de personas que se postulasen para encabezar Sumar pero oficialmente se estima que el licenciatura de Daz podra alargarse hasta las prximas semanas.
Quinielas de nombres
Ahora surgen las quinielas de nombres porque el prximo lder saldra de ese reunión cerrado de 80 personas. Hay dos figuras que destacan por encima de todos por su peso poltico. Uno es Ernest Urtasun, portavoz de Sumar y que encima est en el Gobierno como ministro de Civilización, y otro igo Errejn, portavoz en el Congreso. Fuentes prximas al primero descartan al 100% que vaya a ser l. El segundo no ha cedido pista ninguna aunque hoy se le preguntar en su rueda de prensa en el Congreso. Fuentes oficiales descartan que vaya a ser determinado procedente de la cuota de otros partidos como Ms Madrid, Izquierda Unida o comunes. Eso dejara fuera de la carrera nombres como Antonio Mallo (IU), Pablo Bustinduy -que aun siendo cuota Sumar no est en los rganos- o Mnica Garca (MM), cuyo entorno tambin descarta absolutamente que fuera a admitir el liderazgo de Sumar.
Ahora mismo forman parte de la Ejecutiva, adems de Urtasun y Errejn, Lara Hernndez, Elizabeth Duval, Paula Dorado, Josep Vendrell, Lnder Martnez, Mara Eugenia Rodrguez Palop, Txema Canto o Joaquin Prez-Rey, entre otros.
Fuentes oficiales de Sumar apuntan que uno de los debates que afrontar el Conjunto de Coordinacin es si Sumar asume un maniquí similar al PNV. Es una de las opciones. Es sostener, optar por una bicefalia en la que haya un lder institucional y un lder orgnico. Ese rol habra libertino a Daz, por ejemplo, del musculoso desgaste de la querella con Podemos o de la negociacin con los partidos que forman parte de Sumar.
La crisis abierta en el plan es an ms profunda que la que se ha generado con la renuncia de Daz. Resulta que los partidos que forman parte de Sumar, principalmente IU y Ms Madrid, pero tambin Comproms o la Chunta, llevan tiempo muy enfadados por cmo se est pilotando el maniquí y por la deriva que ha tomado lo que en un principio tan slo iba a ser una coalicin de partidos para las generales.
Sin requisa, Daz cre un partido propio, Movimiento Sumar, que poco a poco se ha ido confundiendo con la coalicin Sumar, intentando admitir a todas las marcas bajo ese paraguas. Eso ha ido generando fuertes tensiones internas, y se han ido mezclando con la imposicin de decisiones. Ah se explican las exigencia de IU y Ms Madrid para cambiar ese maniquí, respetar el raigambre territorial de los socios y tener ms influencia y peso en las decisiones que les afectan.