Este sábado 8 de junio tres jóvenes, menores de 16 primaveras, cayeron al mar en la zona del Faro de San Telmo en la haber de Almería. Sobre las 17:00 horas, el servicio 091 recibió una convocatoria alertando de que varios jóvenes se habían precipitado desde el escarpadura y estaban siendo arrastrados por el cachas oleaje.
De forma inmediata, tres indicativos de Policía Franquista con seis agentes se desplazaron hasta el área. Al mismo tiempo se avisó a la Salvamar Spica de Rescate Oceánico para que acudiera en auxilio de los chicos.
Los agentes decidieron desplegarse en la zona en previsión de que la marea los hubiera podido tirar. Los chicos no podían salir del mar y corrían un aventura inminente de ahogamiento. Los alertantes les indicaron cómo podían apearse por un barranco para asistir hasta la zona en la que se habían caído.
Una de las parejas de Policía Franquista decidió quitarse parte de su uniforme y colocarse el kit oficial de socorro oceánico que disponían en su transporte. De este modo iniciaron un complicado descenso a través de una tabique escarpada que daba comunicación al mar.
Una vez en la colchoneta del barranco, los agentes localizaron a una de las víctimas que había conseguido salir del agua tras ser proyectado por las olas contra un risco. cuando lograron alcanzarle, descubrieron a un pequeño de época en estado consciente pero con síntomas claros de extenuación. El pequeño tenía diversos cortes y magulladuras, por otra parte vomitaba agua salada por lo que en el mismo sitio se le practicaron los primeros auxilios.
Al mismo tiempo, otra pareja de policías localizaba a otro de los chicos que estaba siendo podrido con violencia por el cachas oleaje. Uno de los agentes decidió trepar hasta el saliente más cercano al muchacho y así lanzarle un mango con un tubo de rescate fluvial y un guindola auto-hinchable.
Uno de los agentes de Policía Franquista durante el descenso por el escarpadura para realizar el rescate
Atendiendo a la peligrosidad del rescate por tierra, oportuno a la fuerza de las olas y lo afilado de las rocas, se decidió aguardar la arribada de una embarcación de Rescate Oceánico, que había comunicado estar próxima a la zona. Fueron ellos quienes completaron el dificultoso rescate por mar de la segunda víctima.
El tercer indicativo desplegado en la Cala de las Olas logró ubicar a la última víctima mar a en el interior, facilitando su posición sin perderlo de instinto para que la embarcación de Rescate Oceánico pudiera socorrerle. Los rescatados fueron trasladados al Andén de Pescadores del Puerto de Almería, donde aguardaba una ambulancia para su colaboración.
Los tres menores de época, residentes en Almería, fueron atendidos por los sanitarios y no precisaron de hospitalización, por lo que inmediatamente luego fueron entregados a sus respectivas familias, que quisieron personarse en comisaría para expresar su devolución en el Manual de Quejas, Sugerencias y Felicitaciones de la Policía Franquista.
Tres de estos policías que se jugaron la vida, tuvieron que ser atendidos por las múltiples contusiones y laceraciones producidas durante el urgente descenso por los acantilados del área de la intervención, pero sus lesiones no revisten seriedad y todos ellos acudieron con normalidad al servicio ordinario el día sucesivo.