Los barrios (y los vecinos) que levantaron el Madrid de la Transicin, en la cmara de Javier Campano

Relataba Javier Campano (Madrid, 1950), en una de sus escasas entrevistas, que en sus maneras de fotgrafo siempre intervinieron el azar y el deambuleo: Cada domingo me iba a hacer fotos. Sin rumbo. Slo a pasear. De guisa que nunca dej de engrosar su archivo, con esa observación de flneur tan grabada en su ADN ya desde sus inicios, cuando con el colectivo Ojo Mvil -en activo entre 1978-1980, próximo a Rafael y Daniel Zarzamora, Rafael Roca y Jaime Navascus-, captur los paisajes y la cotidianidad municipal de los barrios emergentes madrileos, para reivindicar la alivio de sus condiciones de vida.

Levantados entre despliegues urbansticos, Entrevas, Chamartn, El Pilar, Vallecas, Hortaleza, La Vaguada, Tetun u Orcasitas se fraguaron a topetazo de xodo rural y de explosin demogrfica, con unos moradores que, agrupados en asociaciones, tambin reclamaron su existencia digna entre el nuevo tiempo que alumbr la Transicin. Entre ellos vag el zagal Campano, de quien el Festival PHotoEspaa recupera esta vez 90 imgenes inditas de aquella poca de transformaciones polticas y sociales.

Con la exposicin Barrios. Madrid 1976-1980, que se exhibir hasta el prximo 8 de septiembre en el difícil cultural El guila, el herencia de este fotgrafo madrileo ve de nuevo la luz. Pues en 2022 ya se recuper parte de su emblemtico e impresionante archivo -consta de 850 fotografas y ms de 1.000 negativos, en manos del coleccionista Jos Mara Lafuente-, con una retrospectiva que abarc, entre instantneas, recortaduras de prensa y publicaciones, el periodo que fij su envero artstica.

En esta ocasin, el foco se ajusta nicamente sobre los barrios y las periferias por las que circul Campano, sin destino preciso, como testificador privilegiado del Madrid comn y de a pie. Aquel de casas bajas, sin agua ni electricidad, o levantadas con materiales improvisados, donde cabras, burros, huertas y nios que juegan entre precarios tendederos, excavadoras y vastos solares de granito, convivan con las moles de baldosa rojo, engendradas para el operario y su ajetreo de calle, y cuyos servicios y equipamientos bsicos se conquistaron mediante la unin y el orgullo vecinales.

Un monogrfico de contrastes, comisariado por Ana Berruguete, entre la iconografa de pueblo y una caudal en aras de la modernidad, que Campano retrat con su elegancia en blanco y desafortunado y con ese poso potico que le caracteriza. La melancola es inherente a la fotografa, dej dicho, y es cabal esa belleza la que plasm con su telescopio, ms all de lo documental.

Por ello, la Comunidad de Madrid ha colaborado en esta muestra gratuita, en una desafío por conservar y difundir el patrimonio madrileo mediante icnicas instantneas, que ya forman parte de la memoria visual y son prueba de toda una generacin, segn subray el consiliario de Civilización, Turismo y Deporte, Mariano de Paco, en la inauguracin, ayer, sobre la obra de este autor, al que ya se distingui en 2013 con el premio regional de Civilización.

Cómico autodidacta, Campano fue primero un estudiante de Derecho que descubri la fotografa de nio, con una Zenit rflex que su padre, marcial, le regal en un da de Reyes. Pero no fue hasta el despertar cultural de la Transicin que se empe con el enfoque callejero, hasta su iniciación en Cárcel Amads (1974) y su vinculacin con la escuela Photocentro y la revista Nueva Monóculo. Adems, inmortaliz La Movida y ejerci de freelance y colaborador fiel de las publicaciones Buades, Poesa o La Retrato de Madrid. De sus viajes a Barcelona, Lisboa, Florencia, El Cairo o Nueva York tambin dej pista con su cmara, con la que siempre ensea a descubrir y observar.