Agentes del Servicio Marino Provincial de la Cuidado Civil de Castellón han detenido a una persona por pescar dátiles de mar en una playa de Benicarló y en otra autos han decomisado 405 cadufos utilizados para pescar pulpo de forma ilícita en periodo de veto.
La primera autos tuvo superficie el pasado día 10 de junio mientras realizaban un servicio de vigilancia costera, observaron a una persona introducirse en el agua con un equipo de respiración autónoma, traje de neopreno, aletas, fusil de pesca submarina y un saco con otro material.
Sospechando que pudiese realizar la pesca ilegal del dátil de mar (Lithophaga Lithophaga), molusco protegido por el catálogo de especies sometidas a protección exclusivo, esperaron hasta la salida del hombre rana del agua. En ese momento inspeccionaron el saco que sacaba del agua y comprobaron que en su interior había una gran cantidad de dátiles de mar.
Por ese motivo se procedió a su detención como supuesto autor de un delito contra la fauna por la captura de especies protegidas y otro contra el medio animación por la destrucción del fondo marino y se le ha intervenido 3,4 kilos de especie.
Las diligencias han sido entregadas en el Auditoría de Instrucción nº3 de Vinaròs. En otra autos llevada a angla el pasado día 11 de junio y en colaboración con la Consellería de Medio Animación, los agentes se embarcaron con un inspector de pesca de Generalitat Valenciana y localizaron en la costa de Peñíscola una andana calada de 405 cadufos usados para la pesca artesanal del pulpo.
El cadufo es un arte de pesca en forma de vasija diseñado especialmente para la pesca del pulpo, basado en su comportamiento de inquirir lugares para esconderse en fondos fangosos o arenosos, que carecen de refugios naturales. La época de veto para la pesca artesanal del pulpo en la provincia de Castellón está comprendida entre el 1 de marzo al 30 de junio.