El hasta ahora presidente de la gestora del PP provincial de Ourense y titular de la Diputación, Luis Último, ha ratificado que se presentará al congreso que el próximo 13 de julio y cerrará de forma definitiva una `era` política de los populares ourensanos.
Último se puso al frente de la gestora del PP ourensano a posteriori de que Baltar renunciase al liderazgo de la formación provincial en octubre del año 2023. Previamente, tras una campaña de las municipales precedida por la polémica de su caso de exceso de velocidad (por el que será judicatura, una vez que el Senado ha suspendido su aforamiento), había dejado la Diputación provincial.
En esta coyuntura y con el aval de la dirección autonómica, Último tomó las riendas de la formación por la vía de la gestora. Este jueves ha reivindicado los resultados electorales obtenidos desde entonces (aún reconociendo que hay ganancia de mejoría, sobre todo en el ámbito recinto).
Al tiempo, ha subrayado que tanto cuando se puso al frente del partido inicialmente como ahora se siente apoyado por los suyos –el propio Manuel Baltar ha transmitido en esta misma marcha, a través de las redes sociales, su respaldo al asimismo corregidor de Pereiro de Aguiar–.
Y sin querer hacer pronósticos sobre si tendrá o no rivales en el próximo cónclave con el argumento de que “siempre” se ha ocupado de lo suyo, ha afirmado que detecta “una amplísima mayoría” a su gracia y que ve su ofrecimiento “ampliamente avalada”. En todo caso, ha esgrimido que “cualquiera se puede presentar”.
Finalmente, preguntado acerca de si preferiría que la suya fuese la única candidatura, ha confesado, entre risas, que “cuanto más obediente mejor”, aunque ha añadido que no tiene “miedo” a las “elecciones”. Eso sí, ha descartado “una lucha fraticida” porque, ha defendido, “no es el estilo de nadie en el PP”.