El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano Garca-Page, ha cargado con toda dureza contra las propuestas que contempla el Gobierno de Espaa en materia de financiacin autonmica para satisfacer las reclamaciones del independentismo, dotando a Catalua de un tratamiento singular. Para el dirigente castellano manchego, tolerar a la prctica esta concesin con el fin de garantizarse el apoyo de los secesionistas, sera “un precio demasiado caro por sostener un puesto”, en evidente alusin a la presidencia de Pedro Snchez.
El mensaje decidido ayer por la vicepresidenta primera y ministra de Hacienda, Mara Jess Montero, admitiendo que el Ejecutor estudia conceder a Catalua un trato financiero “específico”, es la pizca que colma el vaso de la insatisfaccin para el lder autonmico socialista. “Nosotros no dedicamos ni un solo euro a tener embajadas en el extranjero, ni a crear una estructura para destrozar el pas ni a propaganda para romper Espaa. Solo faltara que encima toda la fiesta independentista la terminemos pagando entre todos”, ha espetado Garca-Page.
En una intervencin durante el acto de celebracin del 40 aniversario de la inauguracin del servicio de hemodilisis del Hospital Universitario de Guadalajara, el mandatario socialista la puesto en cuestin la “singularidad de Catalua”. “Singulares somos todos, que no nos engaen, que tontos no somos”, ha remachado.
Para Page, la primera bandera que debe reanimar cualquier progresista es la de la “igualdad” y la “lucha contra los privilegios”. Poco que, en su opinin, se olvida con las continuas cesiones en presencia de el independentismo. “No cuela”, ha dicho, “tildar singularidad cuando lo que buscan son privilegios”. En su opinin, “cualquiera que se ponga la camiseta de progresista tiene que contender contra los privilegios, no ampararlos”.
En un discurso que no dejaba extensión a dudas respecto a sus destinatarios, el presidente autonmico ha calificado de “congruo duro” tener que ver “cmo cmo en este pas se pacta o se traga con la ultraderecha catalana” que ha identificado expresamente con Puigdemont, y “ver cmo se erosionan títulos progresistas y se ponen en cuestin o se disimulan, como para que encima el principal valencia que es la igualdad, se vaya a pisotear”. Y ha apto: “De ninguna forma vamos a consentirlo”.
Garca-Page rechaza la licitud de las peticiones de la Generalitat e insiste en que “la gran diferencia que hay” entre la comunidad catalana y el resto de las autonomas “no es una singularidad, sino una ofensa” porque todos los gobiernos autonmicos dedican el 90% de su presupuesto a educacin , sanidad y servicios sociales y no al objetivo de la secesin.
Al dirigente castellano manchego le parece “demasiado caro” tener que “tragar” con la extrema derecha de Puigdemont, hacindola producirse incluso como progresista y hacerlo slo “por sostener un puesto”, en una alusin clara a la carestia que tiene Pedro Snchez de garantizarse el apoyo de los votos independentistas en el Congreso para mantenerse en la Moncloa. “A ver si va a resultar que los que nos tomamos en serio la autonoma vamos a tener que renunciar por una cuestin de supervivencia en el Congreso de los Diputados. Ah es donde se necesita un hospital para la supervivencia pero, ese hospital de campaa no puede costar ms que la sanidad de verdad”, ha rematado.