Hay obras que transmiten emociones, ya sea a través del color, el silencio y la quietud que reflejan. Además la propia ingenuidad recreada. Esa es la sensación que el visitante percibe cuando observa los 85 cuadros -de las que 60 son óleos y los otros 25, dibujos- que Juan Berenguel (Cuenca, 1943) expone en el Museo Santa Cruz hasta finales de junio, con el sugerente nombre de ‘Efectividad Soñada’.
Nos citamos para hacer un trayecto por la muestra que el pintor conquense mantiene abierta en el museo de Toledo. Berenguel aprovecha para explicar cada uno de los trazos de sus cuadros. Además se detiene y contempla con la examen ingenua del principiante, sus propios paisajes, esos que hablan de la ingenuidad silenciosa que lleva pintando desde que comenzó a estudiar Bellas Artes en la Escuela Superior de Artes de Madrid, ahora colegio de Bellas Artes. teniendo entre sus profesores al adiestrado, grabador y pintor albaceteño, padre del hiperrealismo gachupin, Antonio López.
El nombre de la muestra «Sensaciones de la naturaleza. Efectividad Soñada’ resume lo que Berenguel quiere transmitir al visitante, que no es otra cosa que su coito por la naturaleza. Confiesa, mirando el cuadro de las ‘Barrancas de Bulto’, donde destaca la imponente panorámica panorámica que ha conseguido plasmar y en la que se puede contemplar esa sensación de calma, de paz.
Por eso, repite que él intenta sumergirse y mimetizarse en esos paisajes y extraer de ellos «todo ese mundo de sensaciones que percibo», afirma. «Lo que más me interesa, cuando tengo enfrente un paisaje de la naturaleza, es expresar los sentimientos que me transmiten», confiesa para explicar que la exposición la ha dividido en cinco salas.
Naturaleza en estado puro
En la primera sala, donde están las obras más antiguas (pintadas en 2018) y que ha titulado ‘La belleza de la naturaleza’, lo que quiere mostrar es esa belleza natural que nos transmite el paisaje. «Cuando está en su veterano estado de pureza y la intervención del ser humano no le ha afectado», confiesa este profesor de Bachillerato que impartió Dibujo y que trabajó en la Escuela de Arte de Talavera de la Reina. Además fue director del centro durante 10 abriles.
Algunos de los cuadros que el intérprete conquense expone hasta el 30de junio en Toledo
En la segunda sala, ‘Sensaciones y sentimientos traducidos…», el intérprete utiliza los colores fuertes para dar veterano energía a sus óleos. El rojo intenso, el azur albugíneo del amanecer, el verde y el anodino de la niebla en los campos manchegos que evocan nostalgias, soledad, tristeza, quietud y el silencio.
Y llega la pregunta. ¿Cómo define su obra Juan Berenguel?. Sonríe y te mira con ese sentimiento de honestidad y de buena persona que transmite este ex-político, que ocupó cargos de responsabilidad con José Bono, siendo el primer delegado provincial de Castilla-La Mancha, entre otros.
«Es arte figurativo, asimismo puedo proponer que es realista, pero no lo es. Tiene tintes de surrealismo y es un tanto metafísico. Es una mezcla de muchas expresiones sobre la naturaleza», replica mientras encamina sus pasos a la tercera sala. «Es una figuración muy idealizada, con tintes surrealistas, metafísicos y abstractos», matiza.
Con ‘Naturaleza viva’, el visitante puede contemplar una serie de cuadros en los que las amapolas son protagonistas, y las rosas se integran en composiciones insólitas. Son lienzos en los que la variedad temática muestra una naturaleza viva, dialogante y llena de color. Hay espigas flotantes, que susurran a la indeterminación y reciben al día, jardines floridos con ventanas luminosas que muestran rostros infantiles.
Este mundo de color marca el paso a ‘Reflexiones y sensaciones sobre la naturaleza’, una denuncia que el pintor conquense realiza sobre los comportamientos humanos y la error de cuidado con la naturaleza. Incendios, destrucción y rescoldos nos llevan a contemplar con tristeza la destrucción del paisaje.
En última sala se pueden observar los ‘Bocetos y estudios previos a la obra final’, que requieren de una planificación y que buscan el contrapeso, movimiento, ritmo, acuerdo, dispositivo y energía. Es el medio a través del cual Berenguel explora. trabaja y perfecciona su muralla para alcanzar a la obra final.
Tras este trayecto se puede comprobar que el intérprete ha conseguido sumergirnos en la profundidad de su coito por la naturaleza. A través de sus lienzos, nos transporta a paisajes que van desde las aguas del río Tajo, la ciudad de Toledo bajo un toga de niebla, los campos, llenos de amapolas y de espigas; las viñas rodeadas de cocaína y el invierno en La Mancha conquense, provincia en laque nació Juan Berenguel, que expone su obra en importantes museos de España y de Europa.