El precio de la vivienda continúa su medra. Una subida que se hace evidente sobre todo en las residencias de segunda mano, donde los precio han vuelto a marcar un mayor con una media de 2.120 euros por metropolitano cuadrado. Para encontrar el pico de precios precedente hay que retroceder hasta junio de 2007, durante el apogeo de la burbuja inmobiliaria.
Actualmente, en Santiago de Compostela, un tierra de cuatro habitaciones en una de las zonas más caras de la ciudad puede salir a costar 1.2 millones de euros. Unos precios que igualmente se encuentran al ascenso en la Comunidad Valenciana, donde en los últimos 10 abriles se ha duplicado el precio del arrendamiento, pasando de abonar una media de 400 euros al mes a 970 euros por un tierra de 80 metros cuadrados. Gandía y Valencia se sitúan a la capital de las ciudades más caras de la región.
Son los jóvenes quien están sufriendo sus consecuencias de primera mano, y es que emanciparse cada vez parece más complicado para ellos. Los expertos señalan que en la problemática influye que cada vez haya menos casas para comprar, ya que la mayoría se encuentran destinadas al arrendamiento, mientras que aquellas que venden cuentan con precios inflados.
Compartir tierra no es solo de estudiantes
“Actualmente vivo con mis padres”, es una de las frases más repetidas entre los jóvenes. “No podíamos permitirnos un tierra que estuviera más o menos en condiciones”, alegan. Aquellos que sí han conseguido independizarse, lo han hecho compartiendo tierra. No les queda otra opción: “Tengo un sueldo que ronda los 1200 euros, de los cuales dedico 300 al arrendamiento, comparto casa con cuatro amigos, y el precio del arrendamiento total supera mi propio sueldo“.
Con amigos o con pareja, pero arrendar en solitario hoy en día sigue sin ser una opción: “Se me iría todo mi sueldo en un tierra sola, o sea, es compartir ahora con pareja, o antaño que estaba con amigos”.
Andrea Henry, presidenta del Consejo de la Lozanía de España afirma que pespunte con hacer unas cuentas básicas de los gastos a fin de mes, para conocer la situación de millones de personas en nuestro país:”Para que una persona tierno pueda independizarse en solitario, tiene que asignar el 93,9% de su salario, exclusivamente para ingresar al arrendamiento más luego suministros, luz, agua o gas, lo que hace que nos haga errata nuestro salario al 100% y 75 euros más para poder ingresar a todo eso” sentencia.
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