El Ourense CF no se encontraba cómodo en la primera mitad. El juego directo de los locales les estaba asfixiando. Aun así, Alberto Gil tuvo la opción de adelantar a los suyos, pero no acertó. La Arandina se estrelló en el larguero tras un cabezazo de Fer Bajo en un córner y con Marqueta para sacar un disparo de Frodo en posición clara.
En la segunda mitad, los burgaleses volvieron a estrellarse en el palo. Un lanzamiento de Manzano pegó en el travesaño. Gabri Palmás respondió, pero su disparo se fue alto. Preludio de unos minutos finales en los que “San Marqueta” volvió a hacer de las suyas con dos intervenciones vitales cuando ya se cantaba el gol en la grada.
El marcador no se movió.. El cerocerismo en Aranda de Duero. “El partido fue como la ruleta rusa, cualquiera podía haber ganado, terminar 2-2 o terminar como lo hizo. Por momentos estuvimos bien, pero es cierto que todavía estamos en un período de inestabilidad que no sabemos controlar los partidos”, analizó el técnico Rubén Domínguez tras el pitido final.
Ahora, Los orensanos buscarán confirmar lo conseguido fuera de casa con una victoria en el campo de Oira. La próxima jornada recibirá en suelo ourensano al asturiano Covadonga, rival que suma un punto en tres partidos. Oportunidad de ascender en una categoría tremendamente igualada.